Redacción. La unidad de Farmacia del Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla ha puesto en marcha un nuevo espacio de consultas de dispensación robotizada y almacenamiento para atender a los pacientes que precisan recoger su medicación en el centro hospitalario.
En este sentido, incluye un sistema de compuesto por dos robots, uno de ellos para fármacos a temperatura ambiente y otro para medicamentos sensibles a la temperatura que se mantienen en una cámara refrigerada.
Este robot es uno de los de mayor tamaño del Sistema Nacional de Salud y da soporte de forma simultánea a seis nuevas consultas. Para poder ponerlo en marcha, la subdirección de Ingeniería, Obras y Mantenimiento ha ejecutado un proyecto que, además, ha incluido una sala de espera y aseos.
Facilitar determinados medicamentos
La necesidad de facilitar determinados medicamentos en los servicios de Farmacia Hospitalaria está motivada por la elevada complejidad de los tratamientos, lo que requiere una supervisión y control específico en el área de atención especializada. En concreto, atienden a pacientes con infección de VIH, enfermedades oncológicas, insuficiencia renal crónica, déficit de hormona de crecimiento, distintas patologías reumatológicas que requieren de terapias biológicas, patologías hematológicas, esclerosis múltiple y hepatitis B y C.
El servicio de Farmacia del Hospital Universitario Virgen del Rocío atiende anualmente más de 90.000 consultas a pacientes externos, entre adultos y niños. Esta dispensación y atención farmacéutica constituye, en la actualidad, una de las principales ocupaciones de los servicios de farmacia hospitalaria.
De hecho, en el hospital sevillano supone el 73% del presupuesto, lo que se traduce en aproximadamente 105.000.000 euros. Tal volumen de actividad ha motivado la instalación de esta nueva tecnología, dado que permite ahorros de tiempos y costes importantes en cuanto a la organización, localización y dispensación de medicamentos. Asimismo, agiliza los tiempos de respuesta asistencial y la atención a los pacientes, ya que permite que los profesionales puedan dedicarle más tiempo al paciente en vez de tener que ir ellos mismos a localizar los productos.
Optimizar el control
Por otro lado, ayuda a optimizar el control y la seguridad de productos almacenados y de los periodos de caducidad de los fármacos. Para ello, los robots disponen de un software de gestión integrado compatible con los sistemas de información del hospital, para que cualquier acción quede registrada en la historia clínica del paciente y en las aplicaciones de adquisición y distribución de medicamentos.
El mecanismo se completa a través de una cinta transportadora que desplaza los medicamentos almacenados en los robots hasta la mesa de consulta desde donde el farmacéutico atiende al paciente. Todas estas actuaciones han contado con una inversión que asciende a 170.000 euros. Para ello, han tenido que adecuar y reformar una superficie aproximada de 210 metros cuadrados en la que se reorganizó un área actual de consultas cambiando su uso.
La unidad de Farmacia Hospitalaria del Hospital Universitario Virgen del Rocío cuenta con 35 facultativos especialistas y ocho residentes que, junto con el personal de enfermería, técnico y administrativo, conforman un servicio de más de 170 personas.