Redacción. El delegado de Gobernación, Fiestas Mayores y Área Metropolitana, Juan Carlos Cabrera, ha reconocido que a su área le «inquietan» las condiciones que tienen que soportan los usuarios de ciertas paradas de autobuses en los que la falta de marquesinas o su colocación no combaten las altas temperaturas que se registran en la ciudad desde que entra la primavera. Por eso, se ha comprometido a que la empresa municipal Tussam estudie las «necesidades de acondicionamiento» de las paradas, especialmente, las que están en entornos cercanos a los hospitales, centros de salud y colegios.
Éste ha sido el compromiso que ha verbalizado el delegado en la Comisión de Control y Fiscalización a preguntas de la concejal no adscrita Sandra Heredia, que ya presentó el pasado mes de septiembre una moción en el Pleno para la creación de una comisión no permanente en la que se analizaran las necesidades de acondicionamiento de las paradas de Tussam, alrededor de un millar, de las cuales 700 tienen marquesina, según los datos facilitados por Cabrera en la Comisión.
En la citada moción se recogía que «las altas temperaturas requieren de una serie de medidas para acondicionar la ciudad de manera urgente, garantizando las condiciones óptimas y soportables para las personas que la habitan y que tienen que desplazarse por ella». «Esta dificultad se incrementa –apuntaba la moción– cuando por necesidad hay que soportar estas altas temperaturas esperando un autobús en una parada que no está acondicionada para protegerte del sol».
El delegado de Gobernación se ha comprometido a que el gerente de Tussam trabaje con la concejal no adscrita esta cuestión, de forma que se puedan detectar cuáles son las paradas en las que actuar con la «máxima diligencia», que la propia edil ha identificado en la Comisión, como son las que están en los entornos de los hospitales, los centros de salud y los colegios, ya que por estas zonas transita población vulnerable (pacientes y escolares).