A la hora de hacer frente a la inflación y, consecuentemente, a la pérdida de poder adquisitivo, debemos tener a nuestra disposición las herramientas financieras adecuadas que nos permitan mitigar, en la medida de lo posible, los daños a nuestro poder adquisitivo. Existen diferentes productos y servicios bancarios, entre los que destacan los depósitos bancarios.
Según el comparador financiero Sin Comisiones, en el que podrás encontrar y comparar los mejores depósitos del mercado, los depósitos bancarios conforman uno de los métodos más fáciles, sencillos y seguros para conseguir beneficios garantizados gracias a nuestros ahorros, sin necesidad de asumir riesgos.
¿Qué es un depósito bancario?
Entendemos como depósitos bancarios todos aquellos productos de ahorro que permiten a sus usuarios entregar una cantidad de dinero específica a una entidad de crédito durante un plazo determinado. Una vez pasado dicho plazo, la entidad devuelve el dinero invertido junto a una remuneración pactada previamente.
Por lo general, los depósitos bancarios suelen ser de interés fijo, haciendo que el beneficio obtenido por ellos sea invariable hasta la finalización del plazo del depósito.
La Tasa Anual Equivalente del depósito, o TAE, es un concepto que hace referencia a la rentabilidad efectiva del depósito, al incluir tanto los intereses como los gastos y comisiones. Esto permite la fácil comparación de los productos ofertados por distintas entidades bancarias.
¿Qué intereses están dando ahora los depósitos?
El depósito a cinco años de Banca Sistema, por ejemplo, ofrece un altísimo interés nominal del 3,28%, haciéndolo así uno de los más rentables del momento pero no mucho mejor que sus otros depósitos a cuatro y tres años, con TAE de 3,15% y 3,05%, respectivamente.
Destacar también el depósito a cinco años de la entidad Younited Credit, que ofrece un 3,15% TAE, así como el depósito a 5 años de J&T Banka al 2,70% TAE. Otros ejemplos de depósitos de ahorro muy rentables se tratan del depósito a cuatro años de Klarna Bank, con un TAE del 2,82% y el depósito a dos años de Banca Sistema, con un 2,76% de TAE.
¿Son seguros los depósitos bancarios?
Tal vez hayas pensado que, pese a las promesas de este tipo de productos financieros, realmente no merece la pena invertir dinero en un depósito bancario por el riesgo a perderlo todo.
Pero se trata de un producto bancario, no de inversión, en el que está garantizado el capital depositado más los intereses. El banco está obligado a entregar, a final del plazo, el dinero al cliente y los rendimientos.
Como medida de seguridad adicional, existe el Fondo de Garantía de Depósitos, o FGD: un fondo al que están adheridas todas las entidades financieras de España y que garantiza hasta 100.000 por cada titular.
Sobre la seguridad de los depósitos de ahorros virtuales
Incluso la versión virtual de estos productos financieros ofrece medidas de seguridad. Además de que también están protegidos por el Fondo de Garantía de Depósitos, el dinero también estará garantizado por el banco. En caso de que el plazo fijo acabe cancelándose antes de tiempo y la entidad te aplicase una penalización, esta no podrá ser superior a los intereses brutos que se adquirirán por su uso.
¿Qué tener en cuenta al contratar uno?
Por supuesto, a la hora de buscar la rentabilidad que ofrecen estos productos financieros, no podemos decantarnos por el primero que nos ofrezcan. Es por ello que, en este apartado, procederemos a explicarte los tres aspectos más importantes a tener en cuenta antes de hacerse con un depósito de ahorros:
- Rentabilidad: a la hora de comparar y elegir depósito, es aconsejable fijarse en los más rentables si lo que se busca es obtener los mayores beneficios posibles.
- Contexto político y económico: debido al contexto y a la subida de tipos del BCE, los bancos empiezan a interesarse por captar dinero de sus clientes, por lo que los depósitos a plazo fijo vuelven a ser más rentables (hace unos meses los depósitos ofrecían el 0% TAE).
- Cantidad de dinero a depositar: calcula cuidadosamente cuál es la cantidad de dinero que vas a depositar en este producto de ahorro. Si no lo haces, corres el riesgo de invertir una cantidad de dinero que necesitarás en el futuro.