Redacción. El alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, ha afirmado que la ciudad recupera “una de sus grandes joyas ocultas del patrimonio religioso”: la Iglesia de Santa Clara, rehabilitada por parte de la Archidiócesis tras una aportación del Ayuntamiento por importe de 3 millones de euros, a la vez que ha anunciado nuevas fases de restauración del resto del convento así como iniciativas para la puesta en valor del recuperado enclave patrimonial.
“Entre las prioridades del gobierno municipal en materia de patrimonio está completar la recuperación de este gran espacio y que se consolide como un gran equipamiento cultural de nuestra ciudad”, ha dicho.
Así, tras culminar a mediados del año pasado las obras de restauración de la anexa Torre de Don Fadrique con un millón de euros, hoy ha quedado reinaugurada la Iglesia de Santa Clara, que ha sido posible al ejecutarse el convenio para la rehabilitación firmado en 2018 con la Archidiócesis de Sevilla y que ha conllevado una financiación municipal de 3 millones de euros. Durante la rehabilitación de la propia iglesia, se han descubierto restos del antiguo palacio de Don Fadrique.
Convento
Tras la firma el pasado noviembre de las escrituras con la Archidiócesis de Sevilla por las que el Consistorio asumía la propiedad del convento de Santa Clara, excepto la iglesia y dependencias anexas, se pondrá en marcha un contrato de mantenimiento con una inversión aproximada de 108.900 euros para adecuar zonas exteriores.
Por otro lado, se han iniciado los trabajos para la redacción del proyecto que permita la rehabilitación del conjunto del convento, ejecutándose en distintas fases priorizando la restauración y conservación de la portada y el acceso desde la calle Santa Clara y las edificaciones del Norte del compás y ala oeste del claustro, para posteriormente abordar la Sala de Profundis, las edificaciones de vida particular, las crujías norte del claustro y los antiguos huertos. Para ello, el Ayuntamiento de Sevilla tratará de conseguir financiación estatal a través del programa del 1,5% Cultural, al igual que la obtuvo para la Torre de Don Fadrique.
Y, por último, Antonio Muñoz ha aludido a una tercera iniciativa para reforzar este entorno patrimonial desde el punto de vista cultural: se está trabajando con la Hispalense un acuerdo para el desarrollo del Museo de la Universidad de Sevilla en este mismo entorno. “En suma, la recuperación de un gran espacio patrimonial al servicio de la cultura y, en el caso de la Iglesia de Santa Clara, también para los fieles.
El hecho de que esta joya esté repleta en sus retablos de la obra de Juan Martínez Montañés, añade un plus de atractivo artístico para esta zona norte del Casco Antiguo”, ha dicho el alcalde, quien ha asistido al acto de bendición de la iglesia por parte del arzobispo de Sevilla, José Ángel Saiz Meneses. En este acto también han estado el delegado de Hábitat Urbano y Cohesión Social, Juan Manuel Flores, la delegada de Patrimonio Municipal e Histórico y Artístico, Carmen Fuentes, y el delegado de Gobernación, Fiestas Mayores y Área Metropolitana y del Distrito Casco Antiguo, Juan Carlos Cabrera.
Dentro de la estrategia de recuperación y puesta en valor del patrimonio de la ciudad, que en estos momentos suma intervenciones por 60 millones de euros y donde se incluye también el patrimonio religioso –Capillita de San José, conventos de Madre de Dios, Santa Isabel, Santa Inés, Capilla del Carmen de Calatrava y Hermandad de San Hermenegildo– “para nosotros Santa Clara ocupaba un papel especial y prioritario. Hoy estamos viviendo un momento muy esperado que es el resultado de años de trabajo y de la alianza que hemos configurado con el Arzobispado”, ha concluido el alcalde.
La Iglesia de Santa Clara
La Iglesia data del tramo final del siglo XV. Se construyó cortando parte del frente septentrional del antiguo Palacio de Don Fadrique, del que han aparecido restos. La palladiana portada fue proyectada por Juan de Oviedo y Miguel de Zumárraga y construida en el siglo XVII, con ejecución del cantero Diego de Quesada, siendo autores también de los vistosos estucos realizados pocos años después.
Un dato que no sólo tiene relevancia artística sino que aporta información sobre la economía del convento durante aquella época es el encargo a Martínez Montañés de los retablos para su iglesia, lo que, sin duda, informa sobre una institución religiosa económicamente importante que se podía permitir un encargo a uno de los artistas más caros del momento.
Efectivamente, el interior de la iglesia está prácticamente monopolizado por el nombre del maestro Martínez Montañés, autor de las trazas de los cinco retablos que alberga la iglesia, de los que destaca por su calidad el retablo mayor, y qu posteriormente ejecutados por su taller, aunque también es de mérito la pintura de Sturmio San Roque.