Redacción. El Área de Gestión Sanitaria Sur de Sevilla se ha sumado a la Semana Mundial de la Continencia, auspiciada por la Asociación de Incontinencia Urinaria y Anal (ASIA) y la Federación Mundial de Incontinencia y Problemas Pélvicos (WFIPP). A través de su Grupo de Trabajo Multidisciplinar de Suelo Pélvico pone el foco en una patología «poco conocida y estigmatizada socialmente», pero que supone la tercera afección que «más merma la calidad de vida», por delante de patologías como la diabetes, la artritis reumatoide o la enfermedad cardíaca.
La incontinencia urinaria y anal tiene una gran prevalencia: en España más de seis millones de personas sufren incontinencia urinaria y entre dos y cuatro millones incontinencia anal. Ambas patologías provocan un gran impacto en la calidad de vida de los pacientes y, sin embargo, los especialistas consideran estas cifras sólo aproximativas; «dado que el estigma social que las rodea dificulta el conocimiento de una realidad mayor, ocultada porque quienes la padecen no consultan a su médico por miedo o pudor».
Al respecto, el Área de Gestión Sanitaria Sur de Sevilla dispone de un Grupo de Trabajo Multidisciplinar de Suelo Pélvico que permite un abordaje diagnóstico-terapéutico integral y eficiente. Está compuesto por un completo equipo de profesionales que garantiza la mejor respuesta a esta problemática. Urólogos, ginecólogos, cirujanos, rehabilitadores, anestesistas, fisioterapeutas, enfermeros especializados y profesionales de atención primaria van de la mano.
De tal modo, que la incontinencia urinaria y anal son abordadas desde diferentes ámbitos asistenciales: cirujanos asisten desde su Unidad de Proctología tratamientos de diferentes líneas, rehabilitadores y fisioterapeutas ofrecen herramientas y soluciones, ginecólogos y urólogos aplican tratamientos médico-quirúrgicos en casos de gran complejidad, desde la Unidad del Dolor se interviene para dar soporte en casos donde incide su campo de acción y desde los centros de salud de atención sanitaria existe una coordinación con el hospital «como primera puerta de entrada al sistema sanitario».
Este grupo de trabajo está encabezado por el jefe del servicio de Urología y responsable de la Unidad de Urología Funcional del Hospital Universitario de Valme, Pedro Blasco, quien pone de relieve el impacto sobre la calidad de vida de estas patologías: «el silencio de los afectados los relega al aislamiento y a no tener la oportunidad de conocer que existen terapias y métodos para recuperar la continencia. Por eso los profesionales involucrados en la atención de esta patología estamos obligados a dar visibilidad a esta patología».
Al respecto, una de las líneas más novedosas de este grupo de profesionales es su vinculación a la ciudadanía como estrategia de promoción de la salud. Entre las actividades que impulsa y desarrolla destaca la apertura a la población con el desplazamiento de sus profesionales a los municipios del área sur de la provincia mediante jornadas de puertas abiertas con la finalidad de concienciar a la población de la importancia del diagnóstico y tratamiento de estas patologías para su adecuado control y una mejora de la calidad de vida. En opinión de Blasco, «optimizar los resultados en Salud».
La incontinencia urinaria se convierte en la tercera afección que más merma la calidad de vida, por delante de patologías como la diabetes, la artritis reumatoide o la enfermedad cardíaca. Además subrayan su implicación en el ámbito sanitario a través de los pañales, que son uno de los productos sanitarios de mayor consumo. Sin embargo, todos elevan la voz «sigue siendo una enfermedad tabú y sólo el 50% la consulta con su médico».
Y esta estigmatización social todavía se incrementa más en el ámbito de la incontinencia fecal, donde este porcentaje baja colocándose en apenas el 30% de los pacientes que consultan a los sanitarios. Sin embargo, los especialistas recalcan que existen tratamientos y, «cuanto antes se aborde esta disfunción, más pronto se podrá encontrar alivio a los síntomas o la solución».