Redacción. Los profesionales de la unidad de Medicina Física y Rehabilitación han sumado cuatro premios tras su participación en los congresos de la sociedad española y andaluza de su sociedad. Su implicación a la hora de compartir el manejo especializado de sus pacientes o los nuevos conocimientos que adquieren en los estudios o investigaciones abiertas en la Unidad motiva su elevada participación en estos foros y, por ende, el reconocimiento que obtienen por parte de otros médicos rehabilitadores del país.
Dos primeros premios a las mejores comunicaciones presentadas por residentes, una de ellas por el manejo de la tenotomía percutánea del epicóndilo lateral del codo: buscando la mejor indicación posible. Una técnica mínimamente intervencionista que supone una alternativa terapéutica a pacientes que no han respondido a tratamientos de primera línea.
La otra ha sido por un estudio acerca de la neuropatía del ciático poplíteo externo por SARS COV-2: una afectación subestimada y no tan rara. Ambas distinciones se entregaron en el LXXIV Congreso SAMFYRE de la Sociedad Andaluza de Medicina Física y Rehabilitación, celebrado en Málaga.
También en este encuentro han otorgado el segundo premio al mejor caso clínico presentado de Osteoporosis. En concreto, por el manejo en estos pacientes de la enfermedad de Kummel, una osteonecrosis avascular vertebral consistente en dolor intenso y deformidad de la columna vertebral. Un proceso poco frecuente, y en el que se ha presentado un caso clínico asociado a una lesión medular traumática con fractura vertebral asociada. En el trabajo presentado se realiza una actualización de la evidencia científica en el manejo de este proceso.
Por otro lado, han recibido el segundo premio a la mejor comunicación oral presentada por residentes en el Congreso SERMEF, de la Sociedad Española de Medicina Física y Rehabilitación, organizado en Santander. En este caso, han presentado un protocolo novedoso de valoración ecográfica de la capsulitis adhesiva de hombro, un proceso clínico cada vez más frecuente en los pacientes remitidos a las consultas de Rehabilitación y que pueden causar limitaciones funcionales significativas. Los especialistas del Virgen del Rocío han propuesto es protocolo de valoración ecográfica para mejora el diagnóstico y una individualización del tratamiento en cada paciente para conseguir unos mejores resultados en salud en este proceso.
Siete unidades súper especializadas
El servicio de Rehabilitación del hospital sevillano, dirigido por José Antonio Expósito, está compuesto por diferentes unidades funcionales en la que se atienden a personas con discapacidad en diferentes grados, fases y complejidad según sus diferentes etiologías.
Entre ellas destaca la de Neurorehabilitación, Rehabilitación Músculo Esquelética e Intervencionismo, Rehabilitación de Pacientes con Amputación, Lesionados Medulares, Rehabilitación Cardiopulmonar, Rehabilitación Infantil y Parálisis Cerebral, y Unidades periféricas de Rehabilitación General en centros de salud.
Dada la alta especialización de los servicios que ofrece, cinco perfiles profesionales sanitarios atienden a estos pacientes. Se trata de médicos especialistas en Medicina Física y Rehabilitación, enfermeros expertos en Discapacidad, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales y logopedas especializados en niños y adultos. Siempre, junto a otros profesionales como Técnicos en Cuidados Auxiliares de Enfermería (TCAE) o celadores, personal imprescindible en este tipo de unidades dado la alta carga de cuidados que requieren muchos de los pacientes que se atienden por la gran discapacidad que presentan.
En total, más de 170 profesionales trabajan en esta área en el Virgen del Rocío. Su actividad anual que supera las 40.000 consultas a personas en situaciones de discapacidad reversible o irreversible.
Además, atienden dos plantas de hospitalización; una en el Hospital de Rehabilitación y Traumatología dotada con 17 camas para la fase aguda de la lesión medular traumática y traumatismos craneoencefálicos graves, y otra en el Hospital Dr. Muñoz Cariñanos dotada con 20 camas en la que se atiende la fase subaguda de la lesión medular traumática.
En todos los casos, proporcionan una rehabilitación integral ya que ofrecen todos los programas terapéuticos en este proceso, para alcanzar el mayor grado de independencia y autonomía personal en las personas que han sufrido este grave proceso.