Redaccion. La Torrijada” nace en Sevilla con su primer establecimiento. Se trata de la única tienda de venta exclusiva de torrijas caseras durante todo el año creada por el empresario Ángel Portillo y el chef Fran Jiménez.
Situada en la céntrica calle Lineros 11, La Torrijada acaba de abrir sus puertas para deleitar al público sevillano y a todos los visitantes de la ciudad de un postre tradicional que se desmarca, a partir de ahora, de su fecha típica de consumo: la Semana Santa.
De este modo, este dulce que, desde hace unos años ha saltado de las cocinas de los hogares a las cartas de varios restaurantes, tiene por fin su propio obrador y tienda con toda una variedad de torrijas, desde las más tradicionales a sorprendentes formatos.
Basándose en este postre tradicional, el chef Fran Jiménez ha creado exclusivas recetas, al Pedro Ximénez, a la cerveza Cruzcampo o al vino de naranja.
También existen opciones sin gluten y hasta torrijas veganas en pan de mango o remolacha. Además, en el establecimiento existe la posibilidad de personalizar cada torrija a base de toppings (trocitos de chocolate, nubes de golosina y otros ingredientes) así como helados de distintos sabores.
Su obrador, situado en Dos Hermanas produce tanto los productos que se venden el establecimiento de la calle Lineros como los que se distribuyen para el sector HORECA, otra vertiente del negocio. Con la opción añadida, del envío a domicilio o empresas a través de las apps de reparto.
Por otro lado, La Torrijada tiene previsto la realización de packs de regalo con otros recuerdos típicos de Sevilla.
Sobre los creadores de La Torrijada
La Torrijada es una creación de dos sevillanos unidos al mundo de la hostelería desde distintas vertientes. Ángel Portillo cuenta con una de las empresas de material de hostelería más conocida de Sevilla “Grupo Portillo” y una larga experiencia en el mundo de los caterings y la restauración. Por otro lado, el chef Fran Jiménez, también propietario y jefe de cocina de Piegallo Catering, aporta el ingenio creativo a los fogones. Ambos se han unido en este original proyecto para poner en valor un dulce sevillano tradicionalmente casero, unido a una época del año como la Cuaresma.
Con obrador propio en Dos Hermanas, Jiménez y Portillo se plantean nuevas recetas en ediciones limitadas, colaboraciones con pasteleros, maridajes con vinos de la zona y otras propuestas para ampliar su repertorio de torrijas.
La Torrijada es un negocio en expansión que no ha hecho más que comenzar, sus socios ya tienen su objetivo en la Costa del Sol para abrir nuevos establecimientos e incluso el planteamiento como franquicia.
