Redacción. La Real Academia de Medicina de Sevilla ha acogido la presentación de la ‘Guía Ilustrada y Práctica para el Diagnóstico y Seguimiento Anatomopatológico de la Enfermedad Inflamatoria Intestinal(EII)’, elaborada por los especialistas Miguel Ángel Idoate Gastearena, Álvaro Gutiérrez Domingo y Federico Argüelles Arias, todos ellos profesionales del Hospital Universitario Virgen Macarena.
En concreto, los doctores Miguel Ángel Idoate y Álvaro Gutiérrez ejercen su labor facultativa en el Servicio de Anatomía Patológica, y el doctor Federico Argüelles, cursa su labor en el Servicio de Aparato Digestivo. Los autores tenían como objetivo proporcionar con esta guía una herramienta «esencial» para abordar la compleja afección de la EII de manera más efectiva, ha detallado la Junta en una nota de prensa.
La Enfermedad Inflamatoria Intestinal afecta «a millones de personas en todo el mundo». Se trata de una patología inmunomediada, crónica, sin cura actualmente, que cursa en forma de brotes. Su diagnóstico, seguimiento y manejo, plantea desafíos importantes para los distintos facultativos implicados en todas estas fases.
En este sentido, la ‘Guía Ilustrada y Práctica para el Diagnóstico y Seguimiento Anatomopatológico de la Enfermedad Inflamatoria Intestinal’ proporciona una herramienta esencial para abordar esta compleja afección de manera más efectiva. Editada en siete capítulos, los autores afrontan el estudio anatomopatológico de la citada enfermedad. Así, en el primer capitulo se analizan los aspectos introductorios al diagnóstico de la enfermedad inflamatoria intestinal comentando los hallazgos endoscópicos y quirúrgicos.
En el capítulo dos se detallan las claves diagnósticas desde el punto de vista anatomopatológico y diferencias entre la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa. En el numero tres se desgranan los puntos fundamentales que sirven para hacer el diagnóstico diferencial de la enfermedad inflamatoria intestinal con otras entidades nosológicas.
Ya en el cuatro se incide en la importancia de la biopsia endoscópica en el seguimiento clínico del paciente, para pasar al cinco donde se expone cómo hacer el diagnóstico de las complicaciones de la EII, como son la displasia en las lesiones polipoides y la infección por citomegalovirus.
Finalmente, en los últimos dos capítulos se explica cómo hacer un correcto informe anatomopatológico y se exponen ejemplos de casos clínicos para ilustrar de forma práctica lo comentado en los anteriores capítulos. «Este enfoque interdisciplinario es fundamental para comprender completamente las diversas formas de la enfermedad, ya que ésta se reconoce no solo por sus síntomas y signos clínicos, sino también por sus alteraciones morfológicas y microscópicas», explica el doctor Argüelles.
«La colaboración entre estos dos campos de la Medicina es esencial para brindar el mejor diagnóstico y tratamiento posible a los pacientes, y este Atlas es un testimonio de cómo esta colaboración puede ser fructífera», añade el anatomopatólogo doctor Idoate. La Guía elaborada en el seno del Macarena no sólo es una «valiosa herramienta» para aquellos que trabajan en el campo de la salud, sino que también puede servir como «recurso educativo para estudiantes de Medicina y otros grados de Ciencias de la Salud, patólogos en formación y todos aquellos interesados en aprender más sobre la EII».
