Redacción. El Teatro Central, entidad dependiente de la Consejería de Turismo, Cultura y Deporte, a través de la Agencia Andaluza de Instituciones Culturales, presenta este fin de semana ‘De haber nacido’, la obra coreográfica con la que Mal Pelo-María Muñoz traduce del texto a la danza ‘La vida es sueño’ de Calderón de la Barca.
Y, con dramaturgia de Alberto Conejero, la sala Chácena acoge, con entradas agotadas, ‘En mitad de tanto fuego’, que cuenta con dirección de Xavier Albertí e interpretación de Rubén de Eguía.
La sala B es el escenario en el que María Muñoz y Pep Ramís, Mal Pelo, presentan su última propuesta, ‘De haber nacido’, proyecto escénico que se inspira principalmente en ‘La vida es sueño’, de Calderón de la Barca, y que enriquecen con extractos de ‘Calderón’, obra teatral de Pier Paolo Pasolini. Una forma de bailar a Calderón a través de este montaje caracterizado por la hibridación de lenguajes en el que utilizan el cuerpo, el movimiento, la palabra, la iluminación, la imagen audiovisual y un espacio sonoro rico y dinámico, según ha señalado la Junta en una nota de prensa.
La obra tiene un carácter autoficticio, pues, como argumenta María Muñoz, que esta vez baila en solitario, «hemos construido una Rosaura a través de un imaginario y experiencias reales mías, y con la obra atravesándola».
La directora explica que «nuestro lenguaje es el del cuerpo y no el de la palabra, aunque siempre hemos introducido la palabra como parte del lenguaje del cuerpo en nuestras creaciones como una pincelada o contrapunto de sentido. En este sentido, hacemos una lectura diferente desde nuestra disciplina y contemporaneidad de una obra como es ‘La vida es sueño’, que tantas resonancias ha tenido a lo largo del tiempo».
La propuesta parte del reto que lanzó a Mal Pelo la Compañía Nacional de Teatro Clásico a través de Lluís Homar y Xavier Albertí para participar en el programa «Diálogos contemporáneos» sobre la base de una obra clásica, pero desde un lenguaje actual y en el caso de esta compañía, también, desde una disciplina diferente a la de texto. El resultado es esa obra dividida en tres sueños que presentan en escena a una Rosaura andrógina en busca de su libertad de identidad. Mal Pelo crea un personaje que comparte los caracteres de Rosaura y Segismundo. Y un «lugar» simbólico habilitado para el retrato y la ficción.
Con dirección artística de María Muñoz y Pep Ramis, el montaje cuenta en el reparto con María Muñoz como intérprete, con la colaboración en la dirección y audiovisuales de Leo Castro, la dirección técnica e iluminación de Luis Martí, el concepto musical y espacio sonoro de Fanny Thollot, y las grabaciones y colaboración musical de Quiteria Muñoz (soprano), Joel Bardolet (violín) y Bruno Hurtado (viola de gamba y violón). Además, la compañía está impartiendo estos días un taller de danza contemporánea en colaboración con el Centro de Creación Contemporánea de Andalucía.
UN ALEGATO CONTRA LA GUERRA EN LA SALA B
‘En mitad de tanto fuego’, la obra que llega este fin de semana a la sala Chácena del Central, viene a ser un alegato contra la guerra y a favor de los distintos «sin eufemismos». El texto, firmado por el dramaturgo jienense Alberto Conejero, se trata de una aproximación a ‘La Ilíada’ de Homero que muestra un rechazo a la realidad que supone cualquier guerra. El autor comparte con el público la belleza, el misterio y la oscuridad de un poema épico a través del cual dialoga con la condición humana y enlaza épocas diversas.
«Es una aproximación absolutamente personal e íntima a unos materiales que me obsesionan desde la adolescencia», comenta el autor, «pero es también un reconocimiento de los propios fantasmas en los fantasmas que recorren la Ilíada, de ahí que junto a la cantera inagotable del poema griego aparezcan referencias y citas de Safo, Pedro Lemebel, Anne Carson, Luis Cernuda, voces cercanas y amadas».
En escena, un único intérprete: el actor Rubén de Eguía interpreta, bajo la dirección de Xabier Albertí, el monólogo que parte de un episodio de ‘La Ilíada’, la relación entre Patroclo y su compañero de armas Aquiles. El texto combina voces del pasado y del presente, y es tanto una canción de guerra como un oratorio por las víctimas, un poema oscuro en el que se habla de la violencia del campo de batalla, pero también de la violencia del deseo.
La obra ha supuesto un «reto» para su director, Xavier Albertí, dada la «partitura enormemente compleja» confeccionada por Alberto Conejero, si bien reconoce que para ello ha contado con el «instrumento adecuado», en referencia a de Eguía, intérprete con el que ha trabajado y al que se ha referido como «uno de los grandes actores de su generación». La obra llega al Central tras una gira que le ha llevado por distintos puntos de la geografía internacional y lleva varias semanas con localidades agotadas.
EL HALL DEL CENTRAL EXPONE LA MUESTRA FOTOGRÁFICA ‘¿HAY ALGUIEN EN EL BOSQUE?’
Desde el pasado 1 de marzo, el hall del Teatro Central acoge la muestra fotográfica ‘¿Hay alguien en el bosque?’, del colectivo artístico Cultura i Conflicte y Teatre de l’Aurora. La exposición forma parte de un proyecto multidisciplinar que pone voz a las víctimas de la guerra en la antigua Yugoslavia tras un minucioso trabajo de búsqueda periodística y de creación escénica a partir de la sentencia del Tribunal Penal Internacional por la ex-Yugoslavia que reconocía a cerca de 50.000 mujeres víctimas de violación como arma de guerra durante el conflicto de los Balcanes (1991-2001).
Las imágenes que se pueden ver en el hall del espacio muestran dos realidades generacionales: las mujeres víctimas directas de torturas y violaciones; y los hijos e hijas nacidos de estos embarazos forzados, muchos de ellos, abandonados. «Los llamados «niños invisibles» son hoy hombres y mujeres jóvenes, con ganas de mirar al futuro y de hacer saber a sus madres biológicas que las estiman por encima de cualquier reproche», afirman desde el Colectivo. El proyecto culminará con la proyección del documental homónimo, previsto para el próximo 3 de abril en la sala B, y la representación escénica el primer fin de semana de abril.
