Redacción. Una docena de estudiantes de la Clínica de Derechos Humanos de Sevilla, integrada por estudiantes en prácticas y egresados de la US, actuarán como observadores internacionales en las elecciones generales de la República del Ecuador previstas para el 9 de febrero de este año. La invitación, extendida por el Consejo Electoral Ecuatoriano, es un reconocimiento a la trayectoria y el compromiso de la clínica — con la promoción de los derechos humanos y la supervisión de procesos democráticos a nivel global.
En esta ocasión, el trabajo de observación se realizará desde un centro de votación exterior en Sevilla y la clínica será la encargada de coordinar -a través del jefe de la misión, el profesor de la US Pablo Gutiérrez Vega y de la jefa adjunta y alumna de la US, Julia Villamor Cano-, la colaboración en estos comicios de la Universidad de Girona y la Universidad de las Islas Baleares, que realizarán las mismas funciones desde Barcelona y Palma, uniendo esfuerzos académicos y técnicos para llevar a cabo una observación rigurosa e imparcial. De la Universidad de Girona coordinará los trabajos Marco Aparicio Wilhelmi, y de la de Islas Baleares, Margalida Capellá i Roig. Esta colaboración no solo fortalecerá el análisis y la cobertura del proceso electoral, sino que también subraya la importancia de la cooperación interdisciplinaria e interinstitucional en el ámbito de los derechos humanos y la democracia.
Máximos estándares de exigencia
Ecuador se suma así a la labor de observación realizada en otros ocho procesos electorales internacionales en El Salvador, Serbia, Perú, Colombia, Filipinas, Paraguay, Túnez y El Líbano donde la clínica evaluó, con rigor, objetividad, imparcialidad y bajo los máximos estándares de exigencia, cuestiones que van desde las condiciones de acceso a personas con discapacidad, hasta que no haya intimidación, que se preserve el secreto del voto o que no se usen los medios públicos de manera partidaria.
Con esta experiencia acumulada, la clínica ha demostrado su capacidad para evaluar el cumplimiento de los estándares democráticos, garantizar la transparencia y promover elecciones justas. Esta nueva misión constituye una oportunidad para reafirmar dicho compromiso y contribuir a fortalecer la legitimidad de las instituciones democráticas en el país.
La participación en este proceso de observación no solo refuerza los lazos académicos y culturales entre España y Ecuador, sino que también es una muestra del compromiso global por fortalecer los sistemas democráticos y garantizar la participación ciudadana en condiciones de igualdad y justicia.
