Redacción. La Universidad Internacional de Andalucía (UNIA) ha culminado la fase de formación de su personal para el uso de desfibriladores. El objetivo es reducir los riesgos cardiovasculares de la comunidad universitaria.
De esta forma, la universidad se sumó el pasado mes de noviembre a la iniciativa de los Espacios Cardioprotegidos con la adquisición de cinco desfibriladores semiautomáticos para sus cuatro sedes (La Rábida, Sevilla, Baeza y Málaga) y la Residencia de La Rábida. Esta medida forma parte de las actividades de Prevención de Riesgos Laborales que desarrolla la institución universitaria y tiene como eslogan UNIA con corazón.
El rector, José Sánchez Maldonado, ha estado presente en las últimas sesiones de formación llevadas a cabo en la sede de La Cartuja en Sevilla. Los desfibriladores semiautomáticos son una herramienta esencial, junto con la maniobra de RCP (Resucitación Cardiopulmonar) para afrontar un paro cardíaco súbito, permitiendo salvar la vida de las personas que sufren este episodio si se actúa a tiempo.
Para el correcto uso de los desfibriladores hay que realizar un curso acreditado sobre RCP y uso del DESA, que la UNIA ya ha impartido con la colaboración de la Fundación SSG-Espacios Cardioprotegidos en sus cuatro sedes, formando a 8 personas de cada una de ellas. Además se ha celebrado una sesión teórico/práctica de 4 horas para toda la Comunidad Universitaria.
¿Qué son los Espacios Cardioprotegidos? Son lugares dotados de los equipos y personal necesarios para asistir a una persona en los primeros minutos de producirse una parada cardíaca y desde los que se va a dar aviso a los servicios de socorro.
Para que esa cardioprotección sea efectiva, se regulan los lugares donde pueden instalarse los DESA, así como se especifica la formación que tienen que tener sus posibles operadores de un Espacio Cardioprotegido y la obligación que tienen los mismos de, en primer lugar, activar la Cadena de Supervivencia.