Redacción. El próximo 28 de febrero, Día de Andalucía, el Real Club Pineda de Sevilla volverá a abrir sus puertas a un nuevo ciclo de sus tradicionales Carreras de Caballos, uno de los turf con más solera de la Comunidad Autónoma y que cada año congrega a un importante número de purasangres procedentes de las cuadras nacionales más relevantes, así como a laureados jockeys. Vuelve esta cita, por tanto, a una fecha muy señalada para los andaluces amantes del deporte ecuestre, que, en los últimos años había tenido lugar en el mes de diciembre, bien en el Día de la Constitución Española o en el de la Inmaculada Concepción.
El programa de la presente temporada, incluido nuevamente en el calendario de la apuesta hípica externa de la Sociedad Estatal de Loterías y Apuestas del Estado (SELAE), estará compuesto por cinco carreras, patrocinadas por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación del Gobierno de España, el Excelentísimo Ayuntamiento de Sevilla, la Real Maestranza de Caballería de Sevilla y las empresas Cruzcampo y El Corte Inglés. La primera de las carreras comenzará a las 12.00 horas. Como novedad, el Premio Real Maestranza de Caballería de Sevilla será, además, puntuable para el campeonato del mundo de jinetes amateur.
Esta nueva cita con el turf nacional en las instalaciones del Real Club Pineda de Sevilla estará abierta a todos los públicos, ya que la entrada es gratuita. En este sentido, el Club habilitará, como en años anteriores, una amplia oferta gastronómica y un mercadillo artesanal en el Pabellón del Hipódromo, para que los asistentes puedan disfrutar de una completa jornada de ocio en este día tan importante para los andaluces.
En memoria de Pedro Parias Merry. En esta ocasión, la carrera patrocinada por el Ayuntamiento de Sevilla llevará el nombre de Premio Excmo. Ayuntamiento de Sevilla IMD Memorial Pedro Parias Merry, en honor a este ilustre empresario agrícola sevillano tristemente fallecido a comienzos de 2019. Nieto del General Merry y hermano de Fernando Parias Merry, quien fuera alcalde de Sevilla durante la Transición Española, entre 1975 y 1977, y socio del Real Club Pineda, siempre estuvo, al igual que su familia, muy vinculado al mundo del caballo.
Perito agrónomo de profesión, era un empresario muy querido en la sociedad sevillana, benefactor de múltiples causas sociales, y se mantuvo activo hasta el final de su vida en la gestión de varias fincas en distintas provincias andaluzas, así como de su propia empresa familiar. Precisamente, este 28 de febrero hubiera celebrado su 80 cumpleaños.