Redacción. Facultativos del servicio de Reumatología del Hospital Universitario de Valme de Sevilla han desarrollado una investigación centrada en el Lupus Eritematoso Sistémico (LES) y en la importancia de la detección precoz de sus manifestaciones pulmonares para contribuir a la mejora de la supervivencia y calidad de vida de los afectados. Su interés clínico ha propiciado la presentación de este estudio en el congreso anual europeo de Reumatología: EULAR 19.
El Lupus Eritematoso Sistémico (LES) es una enfermedad inflamatoria crónica, producida por un defecto en el sistema inmune, con mayor predominio entre las mujeres en edad fértil, que puede afectar prácticamente a cualquier órgano: articulaciones, piel, sistema nervioso, células sanguíneas o riñón. Su prevalencia es de unos 20 a 150 casos por cada 100.000 habitantes, cifra que se ha incrementado notablemente en los últimos años debido al avance en el procedimiento diagnóstico de esta enfermedad. Hasta el momento, el pilar básico de tratamiento son los inmunosupresores y corticoides.
Según los investigadores, las manifestaciones respiratorias del LES son frecuentes, llegando a aparecer hasta en el 50% de los pacientes. Esta incidencia aumenta con la evolución de la enfermedad; de modo que, a los diez años del diagnóstico, el 12% de los pacientes presentan daño pulmonar permanente. Dicho deterioro pulmonar no sólo condiciona la calidad de vida de sus afectados, sino que se asocia con una mayor mortalidad.
Al respecto, los reumatólogos del Hospital Universitario de Valme Sergio Rodríguez Montero, Nahia Plaza Aulestia, Mª José Pérez Quintana, Carmen Trapero Pérez y José Luís Marenco de la Fuente han llevado a cabo en este centro sevillano un estudio con pacientes diagnosticados de LES. Tras analizar 165 pacientes con lupus, se identificaron un 23% de casos con afectación pleuro-pulmonar. De ellos, el 34,3% ya tenían compromiso pulmonar en el diagnóstico de lupus, mientras que el 65,7% restante mostró enfermedad pulmonar posteriormente y durante la evolución del lupus.
Respecto a las patologías pulmonares con mayor incidencia en estos pacientes, destacan: 55,8% de pacientes con pleuritis (inflamación de la pleura que puede producir derrame pleural), 36% de neumonía y detección de tromboembolismo pulmonar en el 14% de pacientes. Otras formas severas de enfermedad, como la hemorragia alveolar o la neumonitis lúpica, no superaron el 6% de los casos. Respecto a la gravedad de esta afectación, se documentó una mortalidad del 7,9% durante un seguimiento medio de 13,6 años. Las muertes se debieron a insuficiencia respiratoria grave secundaria a neumonía, hipertensión pulmonar severa y linfoma.
Como conclusiones, los investigadores registran una menor incidencia de manifestaciones pulmonares en pacientes jóvenes, siendo la pleuritis la patología respiratoria más frecuente. Asimismo, aseveran que dentro de la frecuencia de la afectación pulmonar en pacientes con LES, su grado de severidad puede variar hasta derivar en formas de afectación potencialmente mortales, tales como tromboembolismo pulmonar, hemorragia pulmonar o neumonitis lúpica.
Y en este contexto destacan como imprescindible la identificación temprana de estas manifestaciones en el curso de la enfermedad al objeto de minimizar la acumulación del daño. Aconsejan la incorporación a la práctica clínica en el abordaje del lupus un rastreo sistemático de manifestaciones pulmonares para lograr diagnósticos precoces que favorezcan tratamientos inmediatos y así contribuir a una mejora de la calidad de vida y de la propia supervivencia de estos pacientes.