Redacción. El subdelegado del Gobierno en Sevilla, Carlos Toscano, el presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), Joaquín Páez, y la alcaldesa de Aguadulce, Estrella Montaño García, han visitado los trabajos de limpieza que la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) ha desarrollado en el tramo final del cauce del Arroyo de Gilena, en el término municipal de Aguadulce, ya en la desembocadura del Río Blanco. Esta actuación se enmarca en el Plan de limpieza de cauces y arroyos impulsado por este organismo, que cuenta con una inversión de 5,2 millones de euros y del que se benefician 50 municipios de la provincia.
Los trabajos de intervención en el cauce, con un presupuesto de ejecución que asciende a 207.071,54 euros, han consistido en la limpieza y el acondicionamiento del cauce en el tramo final del Arroyo de Gilena, ya en la desembocadura del río Blanco, tramo que en sus últimos 2.400 metros discurre por una sección hormigonada.
La actuación de limpieza y adecuación, que beneficia a terrenos municipales y varias parcelas particulares, se desarrolla en cuatro zonas: en la desembocadura, tramo 1 (a unos 370 metros aguas arriba de la desembocadura), tramo 2 (a unos 1.700 metros aguas arriba de la desembocadura) y en el entorno del arroyo Ganancias- Camino Ganancias.
En la desembocadura, la actuación contempla la reconstrucción de la base, la reposición de las soleras dañadas y la construcción de rastrillo para reponer el material arrastrado bajo el muro de vertido en el arenero que vierte al Río Blanco. Además, se ha repuesto la escollera arrastrada y la rampa sobre el desagüe de la antigua vía del tren mediante una escollera que evite el erosionado.
En los tramos 1 y 2 se han desarrollado trabajos de demolición, carga y transporte a la Obra de disipación de Energía (ODE) para la construcción de la base y reposición del tramo con rastrillos verticales en los extremos.
Finalmente, en el arroyo Ganancias se ha demolido el badén existente, que se encuentra destruido, y se ha realizado la limpieza aguas arriba del cauce. En esta zona también se contempla carga y transporte a la ODE y la ejecución de un nuevo badén con rastrillos laterales.
El Plan de limpieza de cauces y arroyos supone, como ha indicado Carlos Toscano, “la mayor inversión realizada por la CHG en materia de conservación y mantenimiento de cauces desde la devolución de las competencias de la gestión de la Cuenca del Guadalquivir al Estado”. Con una inversión de 5,2 millones de euros, comprende un paquete de actuaciones “prioritarias para la provincia”, que se desarrollan estos meses, para evitar las inundaciones provocadas por las lluvias torrenciales, como las de octubre de 2018.
Los municipios que se beneficiarán de este Plan en la provincia de Sevilla son: Alanís, Alcalá de Guadaíra, Algámitas, Aguadulce, Almensilla, Aznalcázar, Badolatosa, Bollullos de la Mitación, Bormujos, Brenes, Burguillos, Camas, Cantillana, Carmona, Casariche, El Castillo de las Guardas, Coria del Río, Dos Hermanas, Écija, El Pedroso, El Rubio, El Saucejo, Espartinas, Estepa, Guillena, Herrera, Huévar del Aljarafe, Isla Mayor, La Luisiana, La Rinconada, Las Cabezas de San Juan, Lora del Río, Los Corrales, Los Molares, Los Palacios y Villafranca, Marchena, Martín de la Jara, Montellano, Morón de la Frontera, Osuna, Paradas, Peñaflor, San Nicolás del Puerto, Santiponce, Sevilla, Umbrete, Utrera, Villamanrique de la Condesa, Villanueva de San Juan y Villaverde del Río.
