M.C. Contreras. Los alumnos de Infantil y Primaria del CEIP Juan Ramón Jiménez de Tomares han contactado esta semana por videoconferencia vía satélite con la base española en La Antártida desde el Auditorio Municipal Rafael de León, como parte del programa “Antártida Educa”.
Al otro lado de la pantalla, había un tomareño. El trabajo de ‘Antártida Educa’ es dar a conocer el importante papel que están desempeñando las Fuerzas Armadas Españolas en las labores de investigación que están llevando a cabo allí más de 4.000 científicos en relación con el cambio climático y la protección del medio ambiente.
Investigaciones de vital importancia para la supervivencia de la vida en el planeta y enfermedades como el cáncer o el Alzheimer. Expectantes y muy entusiasmados, los alumnos pudieron conversar en directo durante unos minutos con el capitán del Ejército de Tierra, Manuel Landaburu de Lossada, vecino de Tomares, destinado con esta misión a la Isla Decepción en la base española Gabriel de Castilla en La Antártida desde el pasado 8 de diciembre, donde permanecerá hasta el próximo 4 de abril.
El propio Manuel Landaburu ha sido el promotor de la iniciativa. Es padre de una alumna de Infantil, Julia, de 3 años, del colegio Juan Ramón Jiménez, y pudo explicar a los alumnos cuáles son las funciones de apoyo (logística, sanidad, comunicaciones, gestión medio ambiental, seguridad en climas extremos y desplazamientos) que las fuerzas armadas españolas desplegadas en la base están desarrollando en la XXXIII Campaña Antártica.
La iniciativa, que se inscribe dentro del “Proyecto Antártida. Conociendo nuestro planeta”, tiene como objetivo que “los alumnos tomen conciencia de las diferentes partes del planeta, de la importancia de proteger los diferentes espacios naturales, se preocupen por el medio ambiente y piensen qué pueden hacer para contribuir a frenar el cambio climático” ha destacado la concejal de Educación, Bienestar Social e Igualdad del Ayuntamiento de Tomares, Maite Garay.
Entre otras actividades, los pequeños, que han trabajado en clase la importancia de La Antártida y la necesidad de frenar el cambio climático, han apadrinado pingüinos de forma simbólica, con el objetivo de fomentar entre los escolares el respeto a los animales y han conocido las diferentes especies de flora y fauna que habitan en el continente blanco.