Redacción. El sindicato de Enfermería, Satse, ha repartido el material de protección que ha donado a los centros sanitarios públicos y privados de Sevilla, y que se está distribuyendo entre hospitales, centros de salud y centros de especialidades de toda la provincia.
Por el momento, Satse está entregando 2.000 pantallas de protección facial, de las cuales las estructuras de 500 han sido a su vez donadas por un grupo de estudiantes de ingeniería. También se han donado 300 batas, 50 patucos y 50 delantales cuyo material impermeable ha sido comprado por el sindicato y la mano de obra caritativa ha sido puesta por el taller de costura Mercedes de Alba Boutiques del Viso del Alcor, quien previamente ya había realizado una donación de 50 batas.
Además, ha donado 22 walkie talkies que han sido destinados a las UCI del Hospital Virgen del Rocío y Virgen Macarena. Esta demanda partió de los sanitarios que requerían un nexo de unión que contribuyera a la comunicación entre los profesionales que se encuentran dentro del box con los que están fuera, según ha informado Satse en una nota de prensa.
El sindicato de Enfermería ha considerado necesario hacer esta aportación para ayudar en el combate contra el Covid-19 ante el «grave déficit de materiales de protección que están sufriendo cada día los profesionales sanitarios», por lo que espera que ello contribuya a facilitar la labor de los mismos y lo hagan con todas las garantías de seguridad posibles.
Déficits de equipos
Desde que comenzara esta crisis sanitaria, desde Satse se ha reiterado el «déficit de equipos de protección que existe en los centros sanitarios de Sevilla, así como la reutilización que se está haciendo de los mismos, denunciándolo en los Comités de Seguridad y Salud de los centros y ante la Inspección de Trabajo». También ha instado a los propios profesionales a que dejen constancia de la situación y denuncien.
Por ello, Satse ha insistido en que es preciso que desde la administración se pongan todos los esfuerzos necesarios para aumentar las existencias de material de protección y diagnóstico (EPI, mascarillas, test), así como unificar los criterios de uso y distribución en todos los centros.
«No se puede permitir, en ningún caso, que se ponga en riesgo la seguridad de los pacientes y ciudadanos, así como de los profesionales sanitarios, ni convertir a estos en un vector de contagio de la enfermedad por la falta de dotación de las medidas de seguridad necesarias», han considerado.
Así, Satse ha reiterado que «hará todo lo que esté en su mano para proteger la salud y seguridad de los profesionales y de la población, poniendo su granito de arena para que los sanitarios puedan hacer frente al virus con todas las garantías posibles».
