Redacción. La empresa pública del agua, Emasesa, ha publicado la licitación del contrato del servicio de análisis para la determinación cuantitativa y cualitativa de SARS CoV-2 (Covid-19) en aguas residuales, para el periodo 2020-2021, por un importe de 258.310 euros.
Con esta nueva licitación, la empresa pública asegura la continuidad en los controles que viene realizando en todo su ámbito de actuación, lo que le permitirá mantener esta vigilancia hasta la primavera del próximo año. Igualmente, en esta nueva licitación está contemplada la posibilidad de apoyo tanto para la toma de muestras como para el análisis del coronavirus asegurando el aumento en los controles a realizar, detalla en un comunicado.
Emasesa ha implantado un sistema de alerta temprana para la detección de material genético del virus SARS-CoV-2 en aguas residuales mediante técnicas moleculares que permiten la cuantificación de unidades genómicas de dicho virus, siguiendo el protocolo marcado por el Ministerio y publicado por el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y el Ministerio de Economía, Industria y Competitividad.
Una herramienta eficaz para monitorizar y anticipar la presencia del virus
Este sistema se ha mostrado como una herramienta eficaz para monitorizar y anticipar la presencia del virus y su grado de expansión en nuestras poblaciones. El sistema lo conforman un conjunto de puntos críticos que se muestrean periódicamente y que recogen el 100 por cien de la población a la que prestamos nuestros servicios de saneamiento. Los resultados obtenidos se ponen en conocimiento de las autoridades sanitarias para que sirvan de apoyo a la gestión de la pandemia que llevan a cabo.
Este método nace con vocación de ampliarse a otros patógenos y virus; de ser una herramienta complementaria para la de otros profesionales a nivel sanitario o epidemiológico. De este modo, pone a disposición de las autoridades sanitarias una herramienta de estudio «que complementa a la información que ya maneja permitiéndoles localizar zonas y posibles focos en los que puedan producirse nuevos brotes y posibilitar su temprana mitigación», así como detectar casos asintomáticos, ya que en las muestras se puede detectar el virus antes de que aparezcan los síntomas de contagio.
La presencia de restos de virus en las aguas residuales no es perjudicial para la salud. Se analizan muestras de restos de virus para cuantificar su presencia. Las Estaciones Depuradoras de Aguas Residuales (EDAR) son instalaciones seguras, ya que los tratamientos que reciben las aguas residuales permiten la eliminación de estos restos de virus, devolviéndose al cauce el agua ‘límpia’, es decir, en óptimas condiciones.