Europa Press. La Autoridad Portuaria de Sevilla ha adjudicado el suministro e instalación de un sistema de protección perimetral con detección automática de intrusiones que habrá de ser colocado en el recinto de la esclusa ‘Puerta del Mar’, teniendo en cuenta la existencia de la vía navegable, como refuerzo de la protección ya instalada.
Según la información recogida por Europa Press, el contrato, que salía a licitación con un presupuesto base de 177.471 euros, sin impuestos, ha sido adjudicado a Cobra Instalaciones y Servicios, SA, por 141.538, la oferta ganadora de entre las 12 presentadas. Con él, se pretende reformar la protección ya instalada, entre la que se cuenta con un sistema de cámaras o un cerramiento de 2,40 metros que combina hormigón armado y un vallado metálico electrosoldado.
Así, en los pliegos del contrato se detalla que se pretende disponer de un sistema automático de detección perimetral «con la máxima fiabilidad pero que evite las falsas alarmas por cualquier causa». Ya sean animales, inclemencias atmosféricas, entre otras. El sistema, además, proporcionará imágenes de las zonas donde se produzcan las alarmas. Y permitirá emitir mensajes de audio en las zonas de los puentes.
Falsos positivos
Concretamente, se incide en que el sistema tenga «alta fiabilidad y muy bajo índice de falsos positivos». Basándose en la instalación de alrededor de una veintena de cámaras de alta sensibilidad a lo largo del perímetro. Así como en zonas adicionales de interés. Además, se incluirá un sistema de grabación de las imágenes con posibilidad de búsqueda científica para análisis de las grabaciones por eventos.
Todos los sistemas y elementos se controlarán y supervisarán desde la sala de control, que está situada en la torre de control existente. Y se integrarán con los sistemas ya instalados evitándose en lo posible sistemas adicionales a gestionar.
Desde el Puerto se indica que la esclusa está considerada una infraestructura estratégica, «tanto para el Puerto como para la propia ciudad de Sevilla». Por lo que tanto desde el punto de vista de explotación, como desde el de protección marítima, requiere unas medidas de protección «adicionales al actual cerramiento con que cuenta».
