Fermín Cabanillas. Una mañana inolvidable han disfrutado los mayores del Servicio de Atención a Domicilio en equiTEA, en una actividad organizada por la Delegación de Bienestar Social, Infancia y Mayores. Se reanudan así las salidas programadas para este colectivo, que ha sido el primero en volver a la Escuela Ecuestre desde que comenzó la pandemia.
Para algunos ha sido su primera experiencia con caballos, pero para otros ha significado una vuelta a su juventud y el regreso de recuerdos que les han hecho sonreír y revivir momentos felices.
El alcalde de Bormujos, Francisco Molina y la delegada del departamento, Leonor Benítez Mata, les han acompañado en esta jornada en la que, con pequeños ejercicios, han podido trabajar la psicomotricidad, el equilibrio, la movilidad, o la actividad sensorial.
Los mayores, que han sido trasladados desde sus viviendas o residencia hasta esta Escuela Inclusiva de Actividades Ecuestres en el Centro Hípico Zaudín, han cepillado los ponis, les han adornado, les han dado de comer y acariciado. De esta forma, a través del olfato, el tacto, la vista y el oído estimulaban sus sentidos.
Acompañados en todo momento de la psicóloga Marta Alonso y el equipo de voluntarios, los ancianos y personas con dependencia, contactaban con los caballos aprovechando su capacidad de integración, motivación y rehabilitación.
Un paseo para los más valientes
Los más valientes, incluido el alcalde, se han subido a un caballo para dar un pequeño paseo por la zona, lo que les ha servido para reforzar su autoestima y seguridad, uno de los objetivos de estas terapias ecuestres.
Este tipo de actividades permite a los mayores con dependencia su integración, la mejora de calidad de vida y afianza su confianza y orgullo, ya que les resulta fácil emprender ejercicios con los animales. Además acrecienta su ánimo al desarrollarse al aire libre y en grupo, permitiéndoles salir de su entorno habitual y estar en contacto con otras personas.
La visita se ha desarrollado en dos jornadas para atender de forma personalizada grupos pequeños y sus cuidadoras, que juntos han recorrido las cuadras y realizado también ejercicios de pintura.