Fermín Cabanillas. El Monumento Natural de Alcalá de Guadaíra cuenta desde hace dos semanas con una patrulla verde que recorre con motos eléctricas sus más de 970.000 metros cuadrados de extensión en labores de vigilancia y conservación.
Operativa los 365 días del año, vigila que se cumplan las normas de uso como la prohibición de hacer fuego, con especial riesgo en esta época del año, zonas habilitadas para el paso de bicicletas o la necesidad de llevar atadas a las mascotas.
La alcaldesa Ana Isabel Jiménez anuncia otras mejoras de inmediata ejecución, como la reposición de toda la señalética del Monumento Natural y la renovación de los aparatos en la zona de juegos infantiles.
Patrulla verde
La Patrulla Verde de Alcalá está operativa desde el pasado 25 de julio. Supone una mejora sustancial en el mantenimiento, vigilancia, seguridad y estética del Monumento Natural Riberas del Guadaíra tras la puesta en funcionamiento de los últimos contratos de mejora y conservación de los parques y la vigilancia.
Entre las principales novedades están la vigilancia de las zonas verdes con dos motos eléctricas que patrullan todos los días del año en horario de mañana y tarde, así como la próxima reposición de la cartelería con información detallada y normas de uso.
En estas dos semanas, se ha comprobado un aspecto a la mejora para el servicio como es el recambio de las motos actuales por otras, también eléctricas, con chasis más alto y por tanto más adecuadas para los senderos que recorren el Monumento Natural alcalareño.
Son vehículos ecológicos adaptados con la tecnología software para permitir posiciones, grabaciones y recorrido. Los vigilantes ofrecen un servicio de asesoramiento a los ciudadanos a los que informa sobre las normas de uso del Monumento Natural.
Esfuerzo inversor
La alcaldesa espera que la ciudadanía, las personas usuarias que están orgullosas de su Monumento Natural, conozca la gran mejora que se está llevando a cabo en los servicios no sólo de vigilancia, también de mantenimiento con los nuevos contratos generados recientemente, “un esfuerzo inversor por parte del Equipo de Gobierno para dar una mejor respuesta a las demandas ciudadanas en el entorno de los parques de ribera, una de las zonas con más valor natural y patrimonialmente de Andalucía, un espacio verde singular y privilegiado del que disfrutan los vecinos de Alcalá y las personas que nos visitan”
Por otro lado, en breve se comenzará a colocar la nueva señalética en los parques de ribera, tanto en las entradas como en zonas de paso o más afluencia, que incluirán la ubicación concreta de cada parque y las normas de uso o los recursos patrimoniales de los que se puede disfrutar tanto en la zona verde como en la propia ciudad.
Seguridad en los parques
El nuevo contrato de vigilancia conlleva la prestación del servicio de seguridad con apertura y cierre de parques y áreas ajardinadas, conexión a central de recepción de alarmas, custodia de llaves, vigilancia dinámica, intervención inmediata, y mantenimiento de sistemas electrónicos de seguridad tanto para los edificios municipales.
A ello se une el mantenimiento y conservación en los parques de riberas por lotes o tramos, en ambas márgenes con las tareas de conservación de la vegetación y los espacios peatonales (riego, siega, poda, recortes, recebado de caminos, aireación y escarificado, resiembra de praderas, escarda de parterres, rastrillado, limpieza, abonados, tratamientos fitosanitarios, reposiciones y trabajos puntuales de reparaciones y urgencias), así como el cuidado de los manantiales, charcas, galerías o construcciones vinculadas.
Se incluyen también la conservación de los edificios de los molinos, como el mantenimiento de los elementos que componen estas construcciones (pavimentos, paramentos verticales, rampas, muretes, escaleras, etcétera), así como todas las acciones encaminadas a su perfecto estado y las necesidades o reparaciones puntuales que se requieran (ventanas, rejas, eliminación de manchas o pintadas, malas hierbas u organismos nocivos). Otras labores que están reconocidas son la rehabilitación y mantenimiento de los elementos de mobiliario urbano de dichos parques, así como los juegos infantiles, elementos deportivos o de movilidad de personas mayores, obra civil o cauces de agua.
La extensión de los parques de riberas es de 974.322 metros cuadrados diferenciándose cuatro sectores en ambas márgenes del río Guadaíra.