Redacción. La noche de Todos los Santos volverá a iluminarse en el pueblo de Olivares con la recuperación de la tradición de los “Farolillos de Melón”.
En principio no se puede programar ninguna actividad por la premura de tiempo y escasez de melones, pero se pone un primer granito de arena para que el año que viene pueda recuperarse la tradición completa.
Este año se pretende difundir de nuevo la tradición para, el año próximo, organizar una programación de actividades en torno a la fecha indicada.
Costumbre no solo en Olivares
No obstante, desde el Ayuntamiento de Olivares, página web y respectivas redes sociales, se publicará un vídeo explicativo el próximo 31 de octubre.
Se trata de una tradición que aún sigue vigente en muchos municipios andaluces, especialmente en la provincia granadina.
Según la costumbre estos faroles debían colgarse en el dintel de la puerta, para ahuyentar a los espíritus que vagaban libres durante esa noche.
Esta costumbre está especialmente arraigada en las localidades de Salar y Loja en el Poniente Granadino y en otras comarcas como la Subbética y Campiña Sur Cordobesa.
Según la costumbre estos faroles debían colgarse en el dintel de la puerta, para ahuyentar a los espíritus que vagaban libres durante esa noche.