Redacción. La Unidad de Gastroenterología, Hepatología y Nutrición Infantil del Servicio de Pediatría acaba de incorporar recientemente a su cartera de servicios, una moderna técnica de monitorización esofágica aplicable para diagnosticar con precisión y mayor seguridad la patología del reflujo gastroesofágico.
La enfermedad por reflujo gastroesofágico presenta una elevada prevalencia en pediatría. Su incidencia en edades precoces de la vida es muy elevada manifestándose con síntomas digestivos y respiratorios que en ocasiones presentan evolución tórpida, afectando de forma intensa a la salud y calidad de vida del niño y su familia.
La técnica denominada impedanciometría permite en el caso del reflujo gastroesofágico, conocer la presencia; distribución; aclaramiento; composición y tipo del material refluido (ácido o alcalino) y evaluar si sus síntomas están correlacionados con el reflujo.
Mejora sustancial para el estudio
A diferencia de la pH-metría convencional, esta técnica representa una mejora sustancial para el estudio del reflujo gastroesofágico y aporta una información que no podría obtenerse mediante ningún otro procedimiento. Su puesta en marcha requiere la alta cualificación de los profesionales que la llevan a cabo, doctora Yolanda Castillo junto a la enfermera referente Milagros Gordillo.
Anualmente se realizan en la Unidad de Gastroenterología, Hepatología y Nutrición Infantil del Hospital Virgen Macarena, más de 120 phmetrías al año, de las cuales aproximadamente el 80% podrían llevarse a cabo con la nueva técnica.
“La seguridad del paciente con ésta innovadora técnica es absoluta” cuenta la especialista Yolanda Castillo, comparable a la de la phmetría, aumentando en gran medida la rentabilidad diagnóstica y permitiendo con ello un acertado abordaje terapéutico en pacientes con importante afectación derivada de la enfermedad por reflujo gastroesofágico alcalino, o débilmente ácido (apneas, crisis de sofocación, neumonías recurrentes, etc.), no diagnosticable mediante phmetría convencional”.