Fermín Cabanillas. Los vecinos de la localidad sevillana de El Ronquillo han vuelto a participar este martes, día de San Juan, en una curiosa tradición llamada ‘La enramá’, mediante la que se distribuyen por todo el pueblo mensajes anónimos de amor con unas claves basadas en flores y árboles.
Según ha informado el Ayuntamiento en sus redes sociales oficiales ‘La enramá’ se celebra desde hace muchos años, y supone una de las tradiciones más antiguas y singulares del pueblo.
La noche del 23 de junio, los jóvenes se van a dormir sin saber si encontrarán al amanecer un mensaje de amor o desamor en su ventana, mensajes anónimos y con una peculiaridad: no están escritos, “aunque todos en El Ronquillo conocen su significado como si de un cartel se tratara”.
De noche por los campos del pueblo
Y es que, los habitantes de este pueblo de 4.000 habitantes, aprovechando la oscuridad y la privacidad que les brinda la noche, salen al campo, y, conocedores del lenguaje de las plantas, recogen las las ramas y flores “cuyo significado quieran transmitir a la persona amada y las dejan, con sigilo, prendidas en su ventana”.
Entre los significados de algunas de las plantas están el álamo (te amo), la amapola (no estés tan sola), la espiga de trigo (amiga y amigo), el jazmín (serás para mí) o el manzano (pido tu mano).
Para fomentar la tradición, la Asociación de Mujeres Romero y Jara de la localidad ha realizado una exposición en la fuente de Plaza de España, donde se pueden observar numerosas plantas y sus significados, para darlos a conocer a los vecinos que aún no sepan los detalles de esta tradición.
