Carmen González. Cuando se cumplen 39 días de confinamiento, los vecinos de una barriada de Arahal, La Feria III, se han puesto de acuerdo para que este fin de semana sea especial. Han organizado por Whastapp y de forma online un bingo que celebrarán en las azoteas de las viviendas, cada uno en la suya. El juego tendrá todos sus ingredientes, hasta regalos, pero el más importante es que será de carácter solidario.
Así es como lo cuenta una de las vecinas implicada en ese proyecto de entretenimiento y solidaridad, Davinia, que ha formado junto con Rocío, Carreño, Bobi y Antonio lo que llaman «la directiva del confinamiento», donde, incluso, realizan online una junta del «gabinete de crisis». Cada uno realiza una tarea: Rocío lleva las redes de la asociación; Carreño pondrá el equipo de música y cantará los números; Bobi es el animador oficial incluso dentro de la directiva; y Antonio, empresarios de Enerjisol Renovables, que ha buscado a los patrocinadores y sus regalos.
La barriada es conocida por el nombre de La Feria III, y en ella hay especialmente parejas jóvenes que quieren, unidos, pasar un buen rato y que, a la vez, sirva para poner su granito de arena en esta crisis sanitaria. Después de la reunión online mantenida esta semana, han marcado las directrices del proyecto que han denominado «El Gran Bingo».
Cartones solidarios. De ahí que el viernes por la tarde repartirán los cartones en cada vivienda. Ya ha anunciado que va a participar el 80 % de la barriada. Lo harán por los sótanos, respetando la distancia entre ellos y medidas de seguridad correspondiente, previo mensaje de Whastapp para que baje cada vecino conforme llegue la persona que los reparte.
Los cartones no se venden, «es sólo un juego entre vecinos para pasar un buen rato”. Pero si alguno quiere participar con un donativo, la persona encargada de repartirlo llevará una hucha. El dinero recaudado se empleará en la compra de material sanitario para la Residencia del pueblo y las trabajadoras del Servicio de Ayuda a Domicilio.
Cada familia, desde su azotea y con su cartón, estará pendiente del vecino encargado de cantar bingo por medio de un megáfono. La primera cita es este sábado, a las cinco de la tarde, y se jugarán tres bingos por adulto y uno infantil, con un lote de premios por cada bingo donados por varias empresas incluso de fuera de la barriada.Y tienen previsto realizar otra partida el sábado siguiente, 2 de mayo.
Ya avisan que si por casualidad saliera a la vez dos líneas o dos bingos, los ganadores se repartirán su lote como mejor les venga. Y una vez finalizado el bingo de cada sábado los premios se pondrán en la puerta de la vivienda o el sótano para que cada ganador pueda recogerlo sin contacto alguno con el vecino que los reparte.
Para los vecinos y vecinas que participan, el objetivo de todo esto es «divertirnos tanto adultos como niños”, pero dejan claro que “no queremos nunca malentendidos ni que nadie se sienta molesto por nada y que se respete la buena fe de los vecinos involucrados en todo esto». Y quién sabe si después de que pase esta crisis seguirán reuniéndose para jugar y ampliar lazos de vecindad hasta ahora casi olvidados.