Redacción. La cadena de supermercados Carrefour ha incorporado a su surtido de Semana Santa los dulces elaborados en once conventos de nueve provincias españolas, entre los que encuentran las Clarisas de Morón de la Frontera en Sevilla. De este modo, la compañía pone a disposición de sus clientes, hasta el 4 de abril, pestiños, nevaditos, rosquillas, magdalenas, tejas o bizcochos elaborados a la manera tradicional de Morón.
Entre las entidades que se han sumado a esta iniciativa se encuentran, además de las Clarisas de Morón, las Clarisas de Astudillo y las Hermanas Brígidas de Paredes de Nava, ambas en Palencia; las Clarisas de Cantalapiedra en Salamanca; las Clarisas de Segovia; el Monasterio de Santa Cruz de Casarrubios del Monte, en Toledo; las Clarisas de Siruela y las de Llerena, en Badajoz; las Clarisas de Villarrubia de los Ojos, en Ciudad Real; las Agustinas de San Mateo, en Castellón y las Carmelitas de Toro, en Zamora.
La cadena ya colabora con otros conventos, como el de Santa Inés en Sevilla, del que comercializa sus típicos dulces en los hipermercados de esta provincia desde el verano pasado.
Para esta acción, la compañía ha contado con la participación de la fundación Contemplare, que contribuye al sostenimiento de los conventos y monasterios buscando canales de venta para sus productos.