Redacción. El Ayuntamiento de Herrera ha iniciado el proceso de restauración de mosaicos y superficiales marmóreas del conjunto termal romano de la localidad, descubierto casualmente al construir un canal contra inundaciones en 1990.
Se trata de unos trabajos que han salido adelante gracias a la inversión del 1,5 cultural del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, que ha destinado a esta acción 90.700 euros.
Representación hispánica
Algunos de estos mosaicos muestran la representación hispánica más sobresaliente de un combate de boxeo, en los que se aprecia a dos boxeadores desnudos con un árbitro vestido con una túnica, que lleva una vara con la que azuzar a los púgiles en caso de mostrarse demasiado defensivos o para detener golpes prohibidos.
Supone una de las representaciones que mejor han llegado a la actualidad de unos combates que, en la antigüedad, no tenían delimitación de tiempo ni se dividían en asaltos, sino que duraban hasta que el árbitro declaraba el final del combate o uno de los contendientes se retirase alzando el brazo y el dedo índice, pidiendo clemencia.
El mosaico, denominado «Pugilator», está realizado con materiales como la caliza, jaspe y cuarzo, y tiene una gran variedad de colores, como celeste, rosa, rojo, naranja, ocre, marfil, blanco, negro y varios tonos de verde.
Hasta ahora, lo descubierto en Herrera ocupa una extensión de unos 500 metros cuadrados y su hallazgo fue casual, con motivo de la construcción de un canal contra las inundaciones en 1990, mientras que desde 2007 es Bien de Interés Cultural.
Nuevos estudios
La zona visitable y sus alrededores ha sido objeto de varios estudios en los últimos años, como los que realizó la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía financiando el análisis de la calzada y el teatro romano hallados en la zona, dentro del perímetro de las termas romanas.
Así, se comenzaba a estudiar lo ha hallado por la empresa alemana Eastern Atlas, que realizó, por cuenta del Ayuntamiento, una prospección geofísica en el Conjunto Termal Romano de Herrera.
La empresa descubrió que existen tres estructuras arqueológicas en los alrededores a distintas profundidades de la actual superficie, entre ellas una calzada y un edificio con forma similar a un teatro romano.
El Ayuntamiento de Herrera contrató a esta empresa en agosto de 2018 para realizar un estudio sobre la parcela declarada Bien de Interés Cultural, con categoría de Zona Arqueológica, situada a un kilómetro y medio del casco urbano, dirección sur.
El estudio previo se realizó en un radio de 6.400 metros cuadrados con técnicas de prospección magnética y de georadar.