Los sistemas de distribución de agua urbanos no siempre pueden garantizar que el agua que llega a nuestros hogares sea de la máxima calidad posible. Esto significa que el agua de grifo no siempre es la más adecuada para el consumo directo.
De hecho, el agua contaminada puede provocar afecciones como diarrea, cólera, disentería, fiebre tifoidea y poliomielitis. Por ello, los expertos mencionan la importancia de priorizar el consumo de agua embotellada o utilizar sistemas de filtración como purificadores de agua para garantizar la eliminación de excesos de cal, de cloro y de otros elementos no deseados.
Declaran no apta el agua potable de doce municipios
La Consejería de Salud y Familias de la Comunidad Autónoma de Andalucía ha comunicado que el agua en doce ciudades de Sevilla no es apta para el consumo humano, tras confirmarse que la concentración de benceno, hidrocarburo aromático líquido transparente, incoloro, altamente inflamable y volátil, es superior al límite legal permitido.
La condición del agua con niveles de benceno por encima del nivel permisible (1 microgramo por litro en la UE) se originó en la salida de la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) en Echia, afectando a toda la red de distribución en un momento dado.
Esto significa que, al igual que Marchena, Écija y La Luisiana, todos los pueblos que integran el Consorcio de Aguas de Écija no disponen de agua potable para continuar sus actividades diarias como beber o cocinar.
El Consorcio de Aguas de Écija presta servicios alrededor de 180.000 habitantes de la provincia de Sevilla. Las ciudades afectadas por esta medida son: Arara, Cañada del Rosal, Morón de la Frontera, El Rubio, Fuentes de Andalucía, Herrera, La Campana, Puebla de Cazalla, Lantejuela, Marinaleda, Osuna y Paradas.
Sin embargo, aunque el agua está declarada como no apta para el consumo humano, se puede utilizar tareas domésticas como la higiene personal o la limpieza del hogar.
Análisis y calificación del agua
Debido a esta preocupante situación, el consorcio de Agua Plan Écija deberá informar a las personas afectadas la calificación del agua y uso permitido. Además, la empresa gestora debe analizar el parámetro de benceno todos los días hasta que el valor vuelva al límite permitido.
Por su parte, se insta a los municipios de la población afectada a notificar a sus habitantes y las empresas proveedoras deberán proporcionarles agua potable siempre que se mantenga en una correcta calificación.
En adelante, la Consejería de Salud y Familias realizará seguimientos hasta que el agua cumpla con todos los requisitos adecuados para declararse apta para el consumo humano. Entidades como la Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica están realizando tareas de evaluación de riesgos y toma de decisiones para garantizar la salud de los residentes.