Redacción. Dos efectivos del Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) número 2 de la Guardia Civil, con base en Sevilla, han salvado la vida de un niño de 3 años que su tía había encontrado inconsciente en el interior de la piscina de un complejo hotelero de Villarrobledo (Albacete).
En un comunicado, la Guardia Civil ha informado de que los dos agentes, que se encontraban en la terraza del establecimiento público, escucharon los gritos de auxilio de una mujer. Había sacado de la piscina a un niño de corta edad. Tenía síntomas evidentes de ahogamiento. Estaba inconsciente y con una coloración morada al no poder respirar.
Se pusieron en marcha
Los guardias civiles comenzaron a trabajar. Tras comprobar que el pequeño no respiraba y carecía de pulso comenzaron a realizar con celeridad y de forma coordinada las maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP). Rápidamente provocaron que el niño comenzaba a expulsar la gran cantidad de agua que había ingerido. Enseguida recuperó la consciencia.
Tras el rescate, el pequeño fue trasladado hasta un centro médico de Villarrobledo donde se le realizó una exploración para descartar cualquier complicación derivada de la ingestión del agua de la piscina, encontrándose a día de hoy totalmente recuperado.
Avería
Los agentes tuvieran que alojarse en el hotel debido a una avería en el autobús oficial con el que realizaban viaje hasta Sevilla. Tras el final feliz, la madre del pequeño expreso su gratitud a los guardias civiles. Les dijo que la avería del autobús había llevado a los “ángeles de la guarda” hasta Villarrobledo. Les quedó “eternamente agradecida”.
Se trata de los agentes Comino y Calado. Su acción queda para la historia.