Redacción. El Aeropuerto de Sevilla acaba de iniciar la obra de reforma y ampliación de la central eléctrica, un proyecto que se adjudicó por 7.290.000 euros y que permitirá cubrir la demanda energética que se derivará del crecimiento previsto en el aeródromo hispalense.
Esta actuación, que será ejecutada por Comsa, en un plazo aproximado de 29 meses, contempla una nueva distribución de planta del edificio, la incorporación de un almacén de 200 metros cuadrados y la mejora de los accesos a las instalaciones.
También se optimizará el hormigonado de las galerías subterráneas, se sustituirá todo el alumbrado de la central por luminarias de tecnología LED -más eficientes- y se renovará el cableado de distribución de media tensión y comunicaciones.
Por otra parte, se sustituirá y modernizará el equipamiento del que dispone actualmente, con una clara apuesta por la implantación de tecnología punta, que facilitará el control remoto del mismo.
En una segunda fase, se procederá a incrementar la potencia instalada de la central, que en estos momentos tiene capacidad para atender la demanda equivalente al consumo de más de 15.000 hogares.
Obra en fases. La central eléctrica abastece de energía a todo el aeropuerto, por lo que se trata de una instalación muy sensible a la hora de garantizar su operatividad. Con el objeto de compatibilizar la ejecución de los trabajos con el funcionamiento habitual del aeropuerto, se han programado las obras en varias fases, mientras que las pruebas del nuevo equipamiento se realizarán en franjas horarias de baja actividad.
La reforma de la central es un proyecto crucial, teniendo en cuenta el desarrollo que experimentará el Aeropuerto de Sevilla a medio plazo. Esta actuación, la ampliación del edificio terminal y el recrecido de la pista de vuelo son los tres grandes ejes del plan de obras que acometerá el aeropuerto hasta 2021 y que propiciará la mayor transformación de sus instalaciones en 30 años.