Redacción. La Unidad de Medicina Estética del Hospital Quirónsalud Infanta Luisa, liderada por la doctora Araceli Corrales, ha incorporado a su cartera de servicios la última tecnología en luz pulsada para el tratamiento de manchas, mejora de la calidad de la piel, rojeces, así como las afecciones vasculares en la cara y el cuerpo resistentes a tratamientos convencionales, todo ello de manera mínimamente invasiva.
En este sentido, la dermatóloga Araceli Corrales señala que “el aspecto físico se ha convertido en un estatus social de éxito y felicidad”, por lo que hay “una verdadera revolución” en la demanda de tratamientos de Medicina Estética. Así, entre las diferentes patologías que se tratan con el novedoso láser, la más conocida sería para el tratamiento de manchas en la piel –marrones o rojeces–, marcas vasculares, así como también sería eficaz para la eliminación del vello facial y como tratamiento para diferentes tipos de acné.
De igual modo, de cara a la Navidad, la responsable de la Unidad de Medicina Estética del Hospital Quirónsalud Infanta Luisa destaca también la “popularidad” que han adquirido otro tipo de técnicas como el tratamiento con vitaminas –mesoterapia–, que consiste en realizar multitud de canales en la capa de la piel más profunda, impermeable a las cremas, favoreciendo así la penetración de principios activos y aditivos que favorecen la estimulación de las fibras de colágeno y la hidratación a un nivel más profundo.
También apunta al tratamiento con factores de crecimiento plaquetarios como una técnica en boga para el rejuvenecimiento facial y corporal totalmente personalizado, pues se realiza con los factores de crecimiento de plaquetas del propio paciente con una simple extracción sanguínea.
En la Unidad de Medicina Estética del Hospital Quirónsalud Infanta Luisa se usan técnicas eficaces, sencillas y seguras, que permiten una rápida incorporación a la vida social y laboral y, a su vez, se basan en la filosofía del “menos es más”, buscando resultados naturales, discretos y elegantes, pues, para la doctora Araceli Corrales, “la arruga también es bella y entendemos que un tratamiento estético no consiste en conseguir una piel completamente estirada”.
