Redacción. La directora de la Estrategia para la Seguridad del paciente de Andalucía, Eva Moreno, dio a conocer esta semana a directores de unidades, supervisores, gestores de incidentes, comisiones de Seguridad, y Central de calidad asistencial del Hospital Universitario Virgen Macarena (HUVM), la nueva Estrategia para la Seguridad del Paciente del Sistema Sanitario Público de Andalucía.
Durante la inauguración de la jornada de Seguridad del Paciente, organizada por el centro hospitalario como marco a esta presentación, Eva Moreno ha dado a conocer las líneas prioritarias en el ámbito de la seguridad del paciente, una dimensión esencial y transversal a todo el sistema sanitario. El acto también ha contado con la presencia por un lado de Pastora Pérez, Técnico del Observatorio para la Seguridad del Paciente de la Consejería; de la subdirectora médica del hospital sevillano, Consuelo Galindo y del director de enfermería, Jesús Cárcamo. A ellos se suman los organizadores de esta cita, Carmen Barroso, como secretaria de la Comisión Central de Calidad Asistencial del HUVM y Patricia Fernández, como secretaria de la Comisión de Seguridad del mismo centro.
El objetivo de la nueva Estrategia para la Seguridad del Paciente es coordinar y liderar las políticas públicas de seguridad del paciente, desde su diseño y desarrollo hasta su evaluación final, estableciendo actuaciones en diferentes niveles de la organización, con la participación de profesionales y responsables de los distintos sectores del sistema.
El Hospital Virgen Macarena, comprometido con la seguridad del paciente, impulsa de forma continuada diferentes estrategias, siguiendo las recomendaciones internacionales, nacionales y autonómicas. En este sentido, es poseedor actualmente de varias certificaciones nacionales y autonómicas relacionadas con la Seguridad del Paciente como el Distintivo de Manos Seguras, desde el año 2009 y con nombramiento como centro mentor. El certificado de Prácticas Seguras en Cirugía desde el año 2011 y nombramiento centro mentor, el certificado de ‘Centro contra el dolor:dolor perioperatorio’, obtenido en enero del 2017, al que sumó en esta categoría, el obtenido por el Servicio de Anestesiología y Reanimación en 2018.
Seis áreas clave y primer plan de acción
La nueva estrategia presentada hoy apuesta por la seguridad del paciente desplegando su acción en seis áreas clave, para las que se plantean 14 objetivos generales y 39 específicos, que permiten profundizar en diferentes líneas ya existentes y emprender otras renovadas, con las que contribuir a una atención más segura.
La primera de las áreas clave está dirigida hacia la propia organización, poniendo el acento en elementos que son críticos para la seguridad como los modelos organizativos en seguridad del paciente, el liderazgo y el compromiso, las formas, herramientas y métodos de prevención como los procesos y los planes, la mejora en la comunicación, la cultura de seguridad o las estructuras, dispositivos y equipamientos de los centros, entre otros.
Asimismo, la estrategia refuerza la Gestión de los Riesgos en los centros y unidades, planteando una gestión tanto proactiva como reactiva de los riesgos, potenciando el sistema de notificación así como la atención a la primera, segunda y tercera víctima de eventos adversos, es decir, al paciente, al profesional y a la propia organización.
Junto a ello, y con el afán de promover una atención integral segura, la estrategia impulsa las prácticas seguras de una manera global, si bien focaliza la seguridad del paciente en determinadas situaciones y escenarios considerados de especial vulnerabilidad, estableciendo objetivos específicos para estas poblaciones.
Además, pone énfasis en el impacto de las nuevas tecnologías de la información sanitaria en la seguridad de los pacientes y su relevante papel como aliadas a la hora de ofrecer una atención más segura; promoviendo tanto que su uso sea más seguro como que a través de ellas se pueda mejorar la práctica asistencial.
Hay que destacar también la implicación activa de los pacientes en su seguridad, es decir, en la de sus propios procesos de atención, así como su participación y la de la ciudadanía en las políticas públicas de seguridad. Para ello, la nueva estrategia propone avanzar en aspectos de información, concienciación y formación de la población. En este contexto, se plantea también un área que se dirigirá a aumentar el conocimiento en este ámbito a través de la formación, la difusión de buenas prácticas y el impulso de la investigación y la innovación en seguridad.
La Estrategia para la Seguridad del Paciente se implementa a través de planes de acción. La elaboración del primero de ellos, que se ha diseñado para el periodo 2019-2021 y que incluye 82 acciones vinculadas a los diferentes objetivos específicos, ha implicado a todos los actores, desde los profesionales que están en los centros sanitarios hasta la alta dirección, incluyendo mandos intermedios, cargos directivos y la misma dirección de la Estrategia.