Redacción. El proyecto piloto proMETEO Sevilla, que utiliza la ciudad como laboratorio urbano de pruebas, monitoriza constantemente la predicción de temperaturas y prevé un episodio de calor intenso entre el lunes y el jueves de esta semana. La iniciativa prevé que se alcance un nivel elevado de riesgo para la salud de la población, aunque considera pero aún es pronto para categorizar el fenómeno.
No obstante, a la vista de la evolución de las temperaturas en los próximos días proMETEO Sevilla podría elevar el nivel de impacto del episodio de calor previsto hasta declarar la ola de calor Xenia Sevilla. Los técnicos de la iniciativa piloto que lidera el Centro de Resiliencia Adrienne Arsht Rockefeller Foundation, en colaboración con el Ayuntamiento de Sevilla y la Universidad de Sevilla, advierten a toda la población, especialmente a la más vulnerable, de la importancia de seguir las recomendaciones sanitarias para prevenir un golpe de calor y permanecer atentos a los síntomas que provoca este tipo de trastornos.
El sistema piloto en el que se basa proMETEO Sevilla monitoriza y examina la previsión meteorológica obtenida en el Aeropuerto hispalense (Aemet) y las predicciones de OpenWeather y las analiza junto a las condiciones climáticas específicas de Sevilla a lo largo de su historia, así como de los datos de salud y mortalidad. De este modo, el equipo de expertos ha desarrollado un algoritmo que diariamente analiza el estado de los episodios de calor y los relaciona con los posibles riesgos e impactos sobre la salud atendiendo a diferentes variables: la temperatura máxima; la temperatura mínima, relacionada con la falta de alivio nocturno; la humedad relativa; la duración del episodio de calor y las características del tiempo antes de darse el episodio.
Estos factores permiten que el sistema de monitorización de proMETEO Sevilla determine el nivel de gravedad y riesgos del fenómeno meteorológico en relación con las posibles afecciones a la salud de la población y se clasifique atendiendo a cinco niveles: riesgo muy elevado, riesgo elevado, impacto medio, impacto medio-bajo y sin impacto. Cada nivel de riesgo se corresponde con un sistema visual de información y con una serie de recomendaciones.
Es esencial extremar las precauciones y tomar medidas preventivas en los próximos días
La exposición al calor extremo puede provocar deshidratación, mareos, agotamiento, insolación, pérdida de conciencia y otras emergencias médicas. Para afrontar esta situación, desde proMETEO Sevilla se aconseja tomar medidas preventivas y cuidar a aquellas personas del entorno familiar o personal que pueden ser más vulnerables (adultos mayores de 65 años, mujeres embarazadas, niños y especialmente bebés, personas con afecciones médicas preexistentes o enfermedades crónicas, personas dependientes o en riesgo de exclusión).
Por otro lado, y teniendo en cuenta todos los indicadores, desde proMETEO Sevilla se recuerda a la población que nadie es ajeno al calor extremo, incluso las personas jóvenes y mejor preparadas físicamente pueden verse afectadas por las altas temperaturas, a pesar de no considerar que pueden ser vulnerables. De este modo, se proponen una serie de consejos básicos para afrontar una ola de calor:
- Comprobar que tus familiares y amigos, especialmente si son personas vulnerables, están bien atendidos y siguen las recomendaciones sanitarias para afrontar los episodios de calor.
- Reducir los niveles normales de actividad física durante una ola de calor y ser conscientes de los riesgos que supone combinar el deporte con un golpe de calor.
- Las personas vulnerables deben permanecer en entornos frescos durante un episodio de calor extremo.
- Evitar salir durante los tramos horarios centrales. Adelantar la rutina diaria a las primeras horas del día.
- Evitar las zonas en las que el sol incide directamente y buscar calles con árboles y sombra.
- Aumentar la ingesta de líquidos, beber con frecuencia y sin esperar a sentir sed, para reducir los riesgos de sufrir impactos por el calor.
- Utilizar prendas de colores claros y fabricadas con materiales como algodón fino o lino para evitar que el calor se concentre en la ropa.
- Evitar las comidas copiosas y optar por una dieta variada en la que los alimentos frescos, ligeros y con un alto contenido en agua, vitaminas e hidratos, ocupen un peso especial.
- Disminuir la ingesta de bebidas con un alto contenido en azúcar, cafeína y alcohol, ya que tienden a deshidratar y a generar un desgaste energético.
- Cerrar las persianas durante el día y tratar de ventilar las habitaciones durante la noche.
- Usar protección solar, llevar líquidos para hidratarse y proteger la vista con gafas de sol adecuadas.