Redacción. Los servicios de Reumatología y Dermatología del Hospital Universitario de Valme de Sevilla ha celebrado el II Taller sobre la Innovación en la condición psoriásica dirigido a personas afectadas de psoriasis o artritis psoriásica, una iniciativa con la que los profesionales sanitarios comparten con los pacientes herramientas para el manejo de la enfermedad, repercutiendo en una mejor evolución mediante el autocuidado.
El taller ha sido inaugurado por los jefes de servicio de las dos especialidades clínicas implicadas: el reumatólogo José Luis Marenco y el dermatólogo Jerónimo Escudero. Los mismos han estado acompañados por el director y el Vocal de Acción Psoriasis, Santiago Alfonso y Antonio Manfredi, respectivamente.
El Valme ha sido «pionero» en crear una unidad conjunta de Dermatología y Reumatología para el manejo de los pacientes con psoriasis, debido a la elevada frecuencia de artritis entre ellos. Las doctoras Raquel Hernández y Amalia Pérez Gil son las impulsoras de la Unidad Psoriasis-Artritis del Hospital de Valme.
Psoriasis
La psoriasis es una enfermedad inflamatoria crónica caracterizada por la aparición en la piel de placas rojas con descamación; mientras que la artritis psoriásica consiste en la inflamación crónica del sistema musculoesquelético, con impacto multiorgánico, de curso crónico y progresivo. Ambas se asocian no solo a una mayor prevalencia de factores de riesgo cardiovascular, sino a otras comorbilidades relacionadas con el sobrepeso, la obesidad, la enfermedad hepática y la depresión.
Al respecto, el Hospital Universitario de Valme es «pionero» en Sevilla en el abordaje conjunto de ambas enfermedades al crear de forma innovadora hace unos años un dispositivo asistencial multidisciplinar. La dermatóloga Amalia Pérez y la reumatóloga Raquel Hernández son las dos referentes en estas patologías a través de un modelo asistencial de «calidad y eficiente».
Ambas destacan que observan que el manejo adecuado de la enfermedad crónica depende, entre otros factores, del conocimiento de la patología, de la adherencia al tratamiento, de la relación médico-paciente, de la relación del paciente en su ambiente social, de las características personales, del estado emocional y de la actitud de quien la sufre. Esta iniciativa contribuye a la obtención de mejores resultados en salud a través de la actuación en el conocimiento de la enfermedad, prevención y promoción de la salud.
Según estas dos facultativas organizadoras de este foro con pacientes, «es importante entender la condición psoriásica como una enfermedad sistémica, con afectación más allá de la piel y de las articulaciones, así como conocer las comorbilidades asociadas y las medidas de prevención de las mismas». Con este enfoque, se ha trazado un taller como espacio de encuentro de personas con la misma patología para compartir conocimientos sobre la psoriasis desde diferentes perspectivas.
