Redacción. La cálida voz de José Manuel Soto y un repertorio tradicional compuesto por composiciones clásicas como «Campanilleros», «Aleluya», «Villancico de Gloria» o «Madre en la puerta hay un niño» fueron reclamo suficiente para abarrotar la Parroquia de Santa Eufemia y San Sebastián de Tomares en vísperas de Nochebuena.
De esta manera, más de 400 personas disfrutaron de una de las actividades más esperadas de la agenda navideña. El artista creó una atmósfera de emotividad que hizo viajar a los asistentes a través de sus recuerdos familiares hasta una niñez de mazapán y polvorones, de pandereta, zambomba y roscones de Reyes, que forma parte de la memoria colectiva de todo un pueblo. Soto contó además con la colaboración de artistas invitados como Fran Cortés o sus propios hijos.
Desde que en 2017 José Manuel Soto publicara su disco «Tiempo de Navidad» es difícil entender estas fiestas sin el telón de fondo de su voz. El cantante se ha convertido en un imprescindible de las programaciones navideñas y, con más de tres décadas de trayectoria profesional a sus espaldas, es sin duda uno de los artistas más valorados del panorama andaluz.