Fermín Cabanillas. Parte de la villa romana de Osset Iulia Constantia, en concreto varios muros que podrían pertenecer a una estructura de almacenaje junto a una muralla que se alzaba en San Juan y que suponía un punto estratégico de control del comercio entre Híspalis y el Aljarafe, fue descubierta en este municipio durante las obras del Metro de Sevilla. Además de los restos romanos también se documentó parte de la muralla de la fortaleza almohade (siglo XII) de Hins al Faray.
Con el objetivo de poner en valor los hallazgos y proteger el yacimiento se creó un centro de interpretación. Desde el punto de vista arquitectónico, el centro fue concebido como una calle-puente que permite el paso de los peatones, a través de la excavación arqueológica, y se configura por dos volúmenes de diferentes alturas entre los que se inserta el referido paso peatonal que conecta la plaza Doctor Muñoz Cariñanos con el espacio Otto Engelhardt.
El yacimiento
El yacimiento arqueológico que alberga el centro de interpretación es un fiel testimonio de los diferentes usos que se dieron a dicho espacio durante las épocas turdetana, romana y almohade. Los turdetanos ubicaron en esta localización un lagar para la fabricación de vinos, mientras que los romanos transformaron este lugar en una plaza pública porticada con un muro perimetral, del que se han conservado restos de la muralla.
Posteriormente, durante el asentamiento almohade, los árabes aprovecharon los sillares del edificio romano para construir una zona fortificada, que incluye dos torres desde las que controlaban el acceso desde la Vega de Triana hasta la antigua Osset. Durante las investigaciones arqueológicas también se hallaron restos de un cementerio almohade junto a una de las puertas de la muralla.
Información: Prodetur.