Redacción. El presupuesto de la Universidad Pablo de Olavide para 2025 asciende a la cantidad de 115.087.886,38 euros, lo que supone un incremento del 9,69 por ciento respecto a este año. El aumento en las cuentas para 2025 obedece mayoritariamente al crecimiento previsto en la financiación operativa, destinado a atender los gastos de personal y el incremento de costes en el funcionamiento y el mantenimiento de los servicios básicos del campus, debido al incremento del IPC. Francisco Oliva ha resaltado la paradoja que supone que «a pesar de este aumento, la Universidad no pueda cumplir con los compromisos del capítulo I, va a a ser un año difícil».
Para entender este contraste, hay que tener en cuenta que las universidades ingresan por una parte dinero para gastos corrientes, financiación general, y por otra obtienen financiación finalista, destinada a proyectos y programas específicos. Así, de la financiación general, que asciende a 95.633.442,55 euros para el próximo año, se destina a gastos de personal y a suministros básicos en bienes y servicios el 93,29% del total de operaciones corrientes. «Esto da una idea de la enorme restricción que tenemos en el campus para llevar a cabo políticas universitarias», ha declarado el rector durante la presentación del presupuesto en Consejo de Gobierno. De estos gastos, los destinados a personal (capítulo I), se han incrementado un 3,86%, cantidad insuficiente para cumplir con los complementos autonómicos del PDI, la carrera horizontal del PTGAS o los trienios reconocidos según la Ley de Función Pública. A este respecto, Francisco Oliva ha afirmado su «esperanza y deseo en que la Junta de Andalucía elabore una hoja de ruta para cumplir con los acuerdos firmados con universidades y sindicatos, y con el modelo de financiación».
La previsión de financiación finalista, destinada a la ejecución de subvenciones y proyectos de I+D+i, asciende a 19.454.443,83 euros, un 16,9% del total.