Redacción. Metro de Sevilla, sociedad concesionaria de la Junta de Andalucía, ha sido declarado por las Naciones Unidas como agente neutro en la huella de carbono, gracias a las medidas compensatorias puestas en marcha para minimizar las emisiones directas de CO2 (dióxido de carbono) a la atmósfera.
El Metro ha neutralizado 200 toneladas de CO2 de sus emisiones directas en 2020, gracias a su participación en el programa de compensación de Carbono promovido por Naciones Unidas, en el Marco de Desarrollo Limpio Climático. Esta participación se ha realizado a través de Globalvia, accionista mayoritario de Metro de Sevilla, en el que también participa la Agencia de Obra Pública con un 11,76 por ciento del capital, y junto a otras sociedades del grupo.
La compensación de la huella de carbono que el Metro de Sevilla genera debido a la emisión de CO2 a la atmósfera se lleva a cabo gracias a que la concesionaria tiene un contrato de suministro de energía procedente al cien por cien de fuentes renovables, y también a dos proyectos de cooperación internacional que se están desarrollando en Chile por parte de Globalvia.
Energía de origen cien por cien renovable
Desde 2015, Metro de Sevilla contrata el suministro eléctrico a empresas comercializadoras de energía de origen cien por cien renovable, con certificado de garantía de origen. De esta manera, evita anualmente 5.000 toneladas de emisiones indirectas, originadas fundamentalmente en el proceso de producción de la energía eléctrica, necesaria para su actividad.
Por otra parte, la compensación de CO2 que no se cubre exclusivamente con el contrato de suministro eléctrico se ha materializado mediante el saldo obtenido en dos proyectos de plantas de biomasa en Arauco (Chile) durante el año 2020, obteniendo así el Certificado de Cancelación Voluntaria de la ONU.
La Consejería de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio, que gestiona el Metro de Sevilla a través de la Agencia de Obra Pública, destaca el compromiso climático del Metro de Sevilla, que lleva años trabajando y poniendo en marcha una serie de medidas que optimizan el consumo eléctrico, reduciéndolo en el último ejercicio en un 9 por ciento, ya que ha pasado de 13,9 GWh en 2019 a 12,7 GWh en 2020.
Alimentación eléctrica a los trenes
Desde el año 2013, la reducción acumulada en consumo energético ha sido de un 30 por ciento. Entre estas medidas destacan las que se han implementado en los sistemas de alimentación eléctrica a los trenes para maximizar la recuperación de energía que se produce durante su frenado, las mejoras en el software para que la conducción de los trenes sea más suave, evitando cambios bruscos de velocidad, y la utilización de tecnologías eficientes, como los variadores de frecuencia para mejorar la eficiencia de todas las máquinas rotativas o el empleo de luminarias LED en todas las estaciones.
Todos estos datos, sumados a la adhesión en 2020 a la iniciativa Science Based (SBTi), que busca la transición hacia una economía baja en carbono promoviendo el establecimiento de objetivos de reducción de emisiones de efecto invernadero, consolidan a Metro de Sevilla como referente de movilidad sostenible en la ciudad, concepto que va más allá de los beneficios ambientales y que tiene como fin último, la mejora de la calidad de vida de los ciudadanos.