Redacción.El Ayuntamiento de Sevilla, a través de su empresa Lipasam, ha invertido 2,49 millones de euros en la adquisición de nuevos vehículos para la mejora de la limpieza y la recogida de los residuos en la ciudad. En concreto, 1,19 millones se han destinado a 9 vehículos eléctricos hidrolimpiadores y otros 1,3 millones, a 4 compactadores, dos de carga lateral y otros dos de carga superior bilateral. Estas adquisiciones se enmarcan en la estrategia de refuerzo de su flota para mejorar la prestación del servicio público de limpieza y avanzar en la aplicación de criterios medioambientales.
“Lipasam está inmersa en un ambicioso plan para la renovación de maquinaria e inversiones adicionales, con nuevos equipos para mejorar la limpieza de las calles, la renovación de los contenedores de residuos y un nuevo modelo para el mantenimiento de los mismos, y todo aplicando criterios de eficiencia y de sostenibilidad”, ha explicado el alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz.
En el último año, además, se ha reforzado la plantilla, se han realizado nuevos contratos de refuerzo para limpiar pavimentos; las unidades de mejora del mantenimiento de los barrios a través del plan laboral ‘Joven Ahora’ están ya trabajando en coordinación con Lipasam ejecutando tareas complementarias; han crecido las acciones de concienciación y sensibilización sobre la limpieza viaria destinadas a la ciudadanía, y se han reforzado las tareas de inspección y revisión de los espacios públicos a partir de la coordinación entre Lipasam y la Policía Local de Sevilla para así detectar de infracciones.
A todo ello se sumará una nueva línea de trabajo abierta con la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente, que prevé destinar 1,3 millones al año para la retirada de pinturas vandálicas con equipos específicos y complementando las tareas propias que realiza Lipasam.
Los 9 vehículos eléctricos tipo hidrolimpiador están adaptados para la limpieza viaria y del mobiliario urbano, con una dimensión pequeña y gran capacidad de autonomía. Estos vehículos llevarán un equipo hidrolimpiador a presión y un depósito de agua con capacidad mínima de 800 litros. Con los hidrolimpiadores eléctricos incorporados a la flota, se elimina la emisión de gases de efecto invernadero a la atmósfera y, con ello, se reduce la huella de carbono de la empresa municipal de limpieza.
Por tanto, se trata de una iniciativa que se suma a la lucha contra el cambio climático en la ciudad, ya que estos vehículos contienen los últimos avances tecnológicos para maquinaria de limpieza pública y están adaptados a la normativa vigente en materia de protección ambiental y, más concretamente, en lo que a emisión de ruidos y gases contaminantes se refiere. Todo ello, con el objetivo de minimizar las molestias ocasionadas al ciudadano.
Tres de estos vehículos hidrolimpiadores han sido cofinanciados con fondos europeos adscritos al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia-NextGeneration, en ejecución del plan de sostenibilidad turística de la ciudad de Sevilla que, diseñado desde el Área de Economía, Comercio y Turismo, incluye la mejora de la limpieza en las zonas de afluencia turística por parte de Lipasam a partir de vehículos eléctricos y, por tanto, de nulas emisiones a la atmósfera.
Asimismo, en esta misma línea de mejora del servicio público de limpieza, Lipasam ha adquirido 4 compactadores, dos de carga lateral y los otros dos de carga superior bilateral. El objetivo de este tipo de vehículos es reforzar la recogida selectiva residuos urbanos.
El sistema de carga lateral, mediante el que se recoge más del 80 por ciento de los residuos que se generan en la ciudad, presenta numerosas ventajas con respecto al sistema convencional de carga trasera. Además, la recogida lateral se realiza con un camión recolector, de menor nivel sonoro que los de carga trasera, manejado por una sola persona que, ayudado por un juego de cámaras y un sistema automatizado, recoge los contenedores.
Con respecto a los compactadores de carga superior bilateral, es un sistema que presenta múltiples ventajas por realizarse la recogida a ambos lados del vehículo. Igualmente, la contaminación acústica de este tipo de recolectores disminuye bastante con respecto a los de carga trasera.
Con estas nuevas incorporaciones al parque móvil, se continúa mejorando el servicio y la imagen de la ciudad. Además, se optimiza el uso de los vehículos destinados a la recogida selectiva de residuos, contribuyendo con ello a la unificación paulatina de los distintos modelos de contenedores situados en la vía pública. Este tipo de vehículos recolectores aumentan la eficiencia de la recogida en un 250 por ciento.
“Toda esa estrategia de Lipasam se intensificará en 2023, según el proyecto de Presupuesto elaborado por el gobierno municipal. De hecho, las cuentas para el año próximo contemplan el mayor importe de que ha tenido la empresa en la última década. En total, 108,7 millones de euros, 4 millones más que en 2022, crecimiento que nos va a permitir seguir reforzando todos los trabajos que hemos venido realizando, contar con más personal, más inversiones y nuevos programas de mejora de los espacios urbanos”, según ha detallado el alcalde. Asimismo, se avanzará en el proceso de revisión de la ordenanza municipal de limpieza del Ayuntamiento de Sevilla, que data de 2014, y que ya ha iniciado su fase de participación previa.