Redacción. A lo largo de este último año la labor de la Unidad de Foniatría y Disfagia del Servicio de Medicina Física y Rehabilitación del Hospital Universitario Virgen Macarena, Compuesta por un médico especialista en Medicina Física y Rehabilitación (Foniatra) y dos logopedas, ha tenido marcada su actividad por la pandemia mundial existente.
La Unidad se organizó para poder atender a los pacientes minimizando los riesgos de posibles contagios, y para ello durante los meses que duró el confinamiento estricto entre marzo y mayo, se llevaron a cabo 192 tratamientos logopédicos a través de tele- rehabilitación, de los cuales el 40% se atendió telefónicamente, el 25% a través de correo electrónico, 30% por teléfono y correo electrónico, siendo el resto por vía telefónica y correo postal.
A partir de esa fecha, se reiniciaron las terapias con actividad presencial de pacientes, cuyas patologías podían crear secuelas en caso de no realizar tratamientos in situ. Los profesionales logopedas que ejercen su labor en esta Unidad, celebran el Día Europeo de la Logopedia (6 de marzo), este año bajo el lema: ‘Logopedia Hospitalaria en tiempos de Covid’. Las principales secuelas que padecen los pacientes post-COVID están relacionadas con la logopedia y suelen ser la disfagia (dificultad para tragar), disfonías, disartrias, afasias y/o alteración en el lenguaje.
La situación de alarma sanitaria vivida ha conllevado que el número de interconsultas recibidas en la Unidad de Foniatría y Disfagia, respondan a pacientes que han padecido el Covid19 y a los que se les inicia tratamiento ya desde su hospitalización en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital, una vez han sido extubados.
Problemas de voz o disfagia
Estos pacientes son subsidiarios de presentar tanto problemas de voz como disfagia, siendo evaluados y tratados por el equipo de especialistas que integran la citada Unidad. También necesitan de cuidados logopedas aquellos pacientes que, encontrándose en áreas de hospitalización diagnosticados con infección respiratoria, neumonía o insuficiencia respiratoria, se les detecta una disfagia orofaringea.
Mencionar también a los pacientes post-agudos de COVID-19 que una vez de alta hospitalaria en domicilio, residencias de ancianos o centros sociosanitarios, pueden desarrollar una disfagia orofaríngea asociada a la fragilización acelerada que causa la enfermedad.
El logopeda, como profesional de la salud, se dedica a la prevención, detección, promoción, educación, evaluación, diagnóstico, tratamiento, rehabilitación, orientación, asesoramiento, docencia e investigación de las áreas de comunicación, lenguaje , habla, voz, audición, lecto-escritura, así como de los trastornos de las funciones orales no verbales como la succión, deglución, masticación, entre otras. Por todo ello es sumamente importante la visualización y el conocimiento tanto por parte de los profesionales sanitarios, como por los pacientes, de la labor realizada por los logopedas en la Unidad de Foniatría y Disfagia y la atención ofrecida en el ámbito sanitario.