Redacción. El pasado 23 de marzo sobre las 15:30 de la tarde se recibió llamada en la sala CIMACC 091, en la que los padres de un hombre alertaban a la policía de que su hijo había ingerido una gran cantidad de pastillas y se encontraba en la cornisa del edificio, amenazando con arrojarse.
Inmediatamente, fueron comisionados al lugar los indicativos de seguridad ciudadana, quienes al llegar al lugar vieron a esta persona en la azotea, con un teléfono móvil en sus manos con el que comunicaba a su padre la intención de tirarse al vacío.
En una rápida actuación, los agentes de la Comisaría de Policía Nacional de Dos Hermanas, consiguieron acceder hasta él, subiendo a la terraza del bloque de nueve pisos y logrando ganarse uno de los policías su confianza, mientras otros dos, se acercaban por la espalda del joven desde el bloque contiguo pudiendo así reducirlo.
Cabe destacar que debido a la gran resistencia que mostró esta persona a ser rescatada, los agentes corrieron en varias ocasiones el riesgo de ser arrastrados al vacío.
Finalmente, la víctima de estos hechos fue ingresada en un centro hospitalario en el área de psiquiatría.