Redacción. El año pasado se diagnosticó cáncer a más de 47.500 personas en toda Andalucía. Los más habituales: mama en mujeres, próstata en hombres, y pulmón, colorrectal y piel en ambos sexos. Sevilla acumula más del 22% de los nuevos casos.
En el complejo proceso de detección, diagnóstico, tratamiento y seguimiento de la enfermedad intervienen diversos tipos de profesionales de distintos servicios del Hospital Universitario Virgen Macarena. Un centro sanitario público y con marcado carácter investigador que, cada año, atiende más de 2.500 nuevos pacientes con afectación tumoral; y que, a día de hoy, tiene en marcha más de 140 ensayos clínicos centrados en la curación o control del cáncer.
Las personas que sufren esta patología inician su itinerario en este centro sanitario con la sospecha de la correspondiente especialidad responsable de su asistencia de acuerdo con la ubicación del tumor. Una sospecha que se confirma en el servicio de Anatomía Patológica mediante el análisis de diversas clases de muestras, que corroboran la existencia de un cáncer, su tipología y sus características morfológicas.
Diagnóstico
Este diagnóstico, al que se llega mediante la interpretación visual microscópica, permite obtener datos para conocer el pronóstico y también para establecer estrategias de tratamiento. Gracias al desarrollo de la patología molecular, hoy se puede determinar desde este servicio la posibilidad de que un determinado tipo de neoplasia sea susceptible de tratarse con inmunoterapia, procedimiento que activa el sistema inmunitario de los pacientes frente al tumor, o iniciar una terapia personalizada, que permite diseñar fármacos que inhiban el crecimiento tumoral. El servicio de Anatomía Patológica del centro hospitalario analizó en 2021 más de 55.000 muestras de tejidos.
Muchos de los tumores detectados encuentran en la cirugía su solución. El servicio de Cirugía General del hospital andaluz realizó el año pasado más de 500 intervenciones oncológicas. En este apartado, el centro sanitario encabeza el uso de semillas radioactivas en tumores de mama no palpables y en la localización de adenopatías en tumores de mama, melanomas y cánceres de tiroides.
Pionero
Así, el Hospital Universitario Virgen Macarena ha sido pionero en aplicar las intervenciones radioguiadas en diferentes tipos de carcinomas, favoreciendo una extirpación más precisa y menos invasiva del tumor. Este año el centro sanitario ha realizado 368 procedimientos de este tipo de cirugía en las que es fundamental la coordinación de los servicios de Cirugía General, Radiodiagnóstico, Anatomía Patológica, Radiofísica y Medicina Nuclear.
En otros casos, la situación es diferente y el paciente debe pasar por un tratamiento previo o neoadyuvante. Dependerá del momento de la detección y virulencia con que aparezca la enfermedad. Este tratamiento se aplica a veces para reducir el tamaño del tumor y proceder a una cirugía más conservadora, y en otros escenarios, para paralizar o ralentizar su crecimiento.
En esta situación se abre un abanico de posibilidades terapéuticas, independientes y/o combinables, dependiendo del tipo y características del carcinoma. Estas son: radioterapia -destacando la radiocirugía y la radioterapia estereotáctica extracraneal (SBRT)-, quimioterapia, hormonoterapia, terapias personalizadas e inmunoterapia.
Más de 1.900 personas con cáncer
Cuando procede la aplicación de tales tratamientos, y definido tipo, volumen y profundidad del cáncer, Oncología Médica y Oncología Radioterápica entran en escena. Dos especialidades específicas en la lucha contra el cáncer que intervienen y se interrelacionan generalmente cuando la enfermedad está localmente avanzada o ha causado metástasis.
Si el primero atendió el año pasado en primera visita a más de 1.900 personas con cáncer, el segundo realizó más de 1.500 nuevos tratamientos de radioterapia, lo que se traduce en unas 15.900 sesiones.
En cualquier caso, la decisión sobre el diagnóstico y el tratamiento más eficaz no es cosa de un sólo servicio. Cada tumor, según su localización, tiene un subcomité donde un equipo de profesionales consensúa de forma multidisciplinar cómo actuar en cada caso. Actualmente son 16 los subcomités que toman este tipo de decisiones.
Foros
La existencia de estos foros asistenciales agilizan y homogeneizan el trato del paciente en el Hospital Universitario Virgen Macarena, gracias también a la existencia de un comité central, del que dependen estos subcomités, que marca la estrategia global de la atención del cáncer en el centro sanitario sevillano.
Tras el pertinente tratamiento y/o intervención, el paciente oncológico pasa a la fase de seguimiento. La mayor posibilidad de recaída durante los dos primeros años, hace que éste sea trimestral o semestral en este periodo.
Dependiendo del tratamiento, el seguimiento se hace por los servicios de Oncología Radioterápica u Oncología Médica. En el caso de pacientes que no han recibido tratamiento de estos servicios, el seguimiento lo realiza la especialidad de la que dependa la dolencia por su localización. Tras cinco o diez años, en función del riesgo, sin recaídas ni efectos secundarios, el seguimiento pasa a Atención Primaria.
La importancia de la Radiofísica y de la Medicina Nuclear en la detección y tratamiento del cáncer
Tanto en la detección como en el tratamiento del cáncer, la calibración precisa de los dispositivos y su control de calidad es tan fundamental como el cálculo y la verificación personalizada de cada tratamiento. Aquí es cuando interviene el servicio de Radiofísica, responsable de todos aquellos procesos en los que se usan radiaciones ionizantes.
Su relación con el servicio de Medicina Nuclear es íntima, ya que se trata de una disciplina centrada en el uso de isótopos radioactivos a través de radiofármacos que se usan para la eliminación de restos que pudieran quedar tras una cirugía o recidiva del mismo, en un cáncer por ejemplo de tiroides, o bien como vía terapéutica en otros cánceres inoperables como el Lutecio 177 en tumores neuroendocrinos. No obstante, no hay que olvidar que la función principal de Medicina Nuclear son las pruebas de diagnóstico por imagen con radiaciones ionizantes.
Estas pruebas que permiten la detección, determinando su extensión y estadiaje, y seguimiento del cáncer son gammagrafías, SPECT-TAC o Tomografía para la Emisión de Positrones (PET). Tan sólo en 2021 el servicio de Medicina Nuclear del centro hospitalario andaluz realizó más de 2.230 PET, prueba cuyos resultados suponen una reorientación en la conducta terapéutica indicada hasta en un 40% de los pacientes con cáncer.
Radiofísica
Radiofísica no sólo va de la mano de Medicina Nuclear sino también del servicio de Oncología Radioterápica. En este caso se trata, fundamentalmente, de realizar el diseño individualizado de los tratamientos oncológicos en los dispositivos que administran sesiones de radioterapia, los aceleradores lineales.
En técnicas de tratamientos oncológicos tan sofisticadas como la radiocirugía y la radioterapia estereotáctica extracraneal (SBRT), aplicadas de forma pionera en Andalucía por el Hospital Universitario Virgen Macarena en los cánceres de próstata guiados por ecografía, su éxito se basa en la deposición precisa de altas dosis de radiación en tumores muy pequeños. Como consecuencia de este incremento de radiación de las dosis, la ya elevada precisión de los tratamientos radioterápicos se vuelve aún más exigente. El centro sanitario administra al año entre 75 y 100 tratamientos de SBRT contra diferentes tipos de tumores.