Fermín Cabanillas. Doce croquetas de oro para terminar 2020. Es la propuesta de la empresa sevillana ‘La croqueta coqueta’, una firma especialista en este tipo de productos que ha ideado esta original forma de cerrar este nefasto año con un producto gastronómico innovador.
José María Tavallo, el gerente de la empresa, se reunió con su equipo de marketing hace unos días, “y pensamos que había que terminar el año con algo diferente, que ponga un punto de calidad en la despedida, y a la vez con la simbología que el número 12 tiene al cerrar el año”.
Una base de croquetas seleccionadas
Por eso, nacieron las ‘Croquetas de oro’, un producto que tiene como base “una selección de las croquetas que hacemos normalmente, las que ponemos en nuestra carta a diario”, pero que tienen una cobertura de oro comestible. “Cuando tuvimos la idea, contactamos con una empresa especializada en productos gastronómicos, y la idea salió adelante”.
El único matiz es que las croquetas se venden ya fritas, porque el baño de oro se le da una vez que están terminadas, para que no se pierdan en la sartén, “y el cliente solo tiene que llevársela a casa, darle un ‘calentón’ y disfrutarlas con la familia”.
Tavallo ha dicho que “en un año en el que poco brilli brilli vamos a tener por fuera, no está mal que brille un producto gastronómico”, y con esa premisa ha diseñado la idea.
Solo ha recordado que es recomendable encargar las croquetas con tiempo suficiente para que cada persona se la pueda llevar a su casa. Tavallo espera que la idea sea un éxito, “y que pongamos un granito de arena en olvidar este año tan malo, que a todos nos tiene que servir para sacar cosas positivas y recordar a los que se fueron”.