Redacción. Endesa y la Fundación Juan XXIII han desarrollado un plan formativo para favorecer la inclusión de personas con discapacidad en el sector de las energías renovables. El objetivo es «facilitar» su posible incorporación en trabajos medioambientales asociados a plantas fotovoltaicas. Este plan ha llegado a Brenes y Alcalá de Guadaíra, donde Endesa cuenta con plantas renovables cercanas y quiere contar con personal especializado de la zona.
Los diez alumnos de la Fundación TAS de Brenes y los 17 de la Asociación Prolaya e Inclusión Activa de Alcalá de Guadaíra han recibido sus diplomas al finalizar el curso en compostaje, desbroce y mantenimiento de pantalla forestal de plantas renovables. El acto de entrega en cada una de estas asociaciones ha contado con la asistencia de Juan Carlos Cuevas, responsable de Proyectos de Sostenibilidad de la zona de Endesa, y Daniel Pérez Candela, docente de Soluciones Verdes de la Endesa y Fundación Juan XXIII.
«El sector de las renovables necesita personal especializado no sólo durante la construcción de proyectos, sino, sobre todo, durante su operación y mantenimiento. Las instalaciones precisan de profesionales que mantengan las plantas del perímetro y que sepan desbrozar las zonas entre los paneles para favorecer el tránsito de las personas y la maquinaria que trabajan en las mismas, así como evitar que la vegetación pueda afectar a las placas solares», ha explicado Endesa en una nota de prensa.
Con esta premisa, el curso forma parte de las actividades de formación que lleva a cabo Endesa en todas aquellas áreas donde construye instalaciones de generación de energías limpias. Además del material didáctico, a los alumnos del curso se les ha hecho entrega de un kit de material «imprescindible» para llevar a cabo las tareas de compostaje, así como una desbrozadora, una trituradora profesional y los equipos de protección individual necesarios para llevar a cabo estas tareas. Todo ello, con el objetivo de poder seguir aplicando lo aprendido, tanto en sus instalaciones como en los posibles trabajos que se deriven por esta formación.
El contenido de esta actividad formativa está compuesto por un total de 99 horas, de las cuales 37 son prácticas. Esta iniciativa contribuye al cumplimiento de diez de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la mejora del uso de los medios digitales por parte de las personas con discapacidad, ha recordado la compañía eléctrica.