Fermín Cabanillas. La localidad sevillana de Coripe ha amanecido hoy con todos sus bares cerrados y los vecinos confinados, en respuesta a la petición de la alcaldesa, Susana López, tras conocer que hay 26 de sus 1.200 vecinos contagiados de covid y aún no tener la Junta actualizados los datos para proceder al cierre oficial.
La alcaldesa pidió ayer a sus vecinos que se confinen en sus viviendas, a lo que los propietarios de los nueve bares del pueblo respondieron cerrando los mismos, mientras que las tiendas de alimentación mantienen un horario solo de mañana, con cierre a las dos de la tarde.
La propia edil está recorriendo el pueblo en un coche oficial de la Policía, para, a través de la megafonía del vehículo, recordar a los vecinos la importancia de que no salgan de las viviendas.
Además, ha comunicado que el Ayuntamiento está disponible para atender a los vecinos que necesiten algún servicio básico, y los propios concejales llevarán a las casas lo que los coripeños precisen sin que salgan de sus casas.
La edil lo ha reclamado a pesar de que el pueblo mantiene una tasa oficial de contagios de 888 casos por 100.000 habitantes. No implica que tenga que cerrar la hostelería, aunque ha enfatizado que “la situación es grave, la más grave de toda la pandemia, y no podemos esperar a que tomen medidas por nosotros”.
