Fermín Cabanillas. Las cascadas del Huéznar se localizan en el curso alto del Rivera del Huéznar, cerca de su nacimiento. En esta zona, el río discurre bajo densos bosques de galería, formando remansos en algunas pozas y superando desniveles de pequeña altura mediante saltos de agua, en los que se han ido originando cascadas de travertino o tobas calizas, por precipitación del carbonato cálcico contenido en el agua sobre las rocas o sobre las plantas.
Los depósitos siguen la forma de la cascada, originando toboganes y cortinas de roca que dan al paraje un aspecto muy característico, que le ha valido su declaración como Monumento Natural por sus valores de tipo geológico. Los desniveles que dan lugar a los saltos de agua son consecuencia de dos fallas de desplazamiento que se encuentran en el cauce del río.
En todo el curso alto del Rivera del Huéznar la vegetación ripícola es muy rica, con árboles como sauce, fresno, chopo, olmo, y diferentes especies de arbustos. Entre la variedad de aves que viven al abrigo del bosque de galería hay que destacar mirlo acuático y martín pescador.
Es destacable desde el punto de vista turístico el área recreativa El Martinete, con zona de acampada.
Información: Prodetur.