Redacción. Desde hoy lunes y hasta el próximo domingo 11, la Dirección General de Tráfico (DGT) pone en marcha en la provincia de Sevilla una nueva campaña de control en las carreteras convencionales con el objetivo de que los conductores extremen la prudencia al volante.
Las carreteras convencionales acumulan una parte importante de las víctimas en accidentes de tráfico, debido a sus características constitutivas (ausencia de separación de sentidos, cruces a nivel), y a las condiciones de muchos de los desplazamientos que se realizan en ellas, con especial importancia en el caso de los desplazamientos de corto recorrido y en fin de semana.
La campaña de la DGT comprende un amplio control de infracciones y, además de la velocidad, los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil controlarán los adelantamientos indebidos, la ingesta de alcohol y drogas, el uso del casco y los sistemas de retención, la utilización del teléfono móvil durante la conducción y, en general, cualquier infracción de la normativa vigente en materia de circulación y seguridad vial.
El subdelegado del Gobierno en Sevilla, Carlos Toscano Sánchez, ha indicado que se trata de carreteras que presentan una alta siniestralidad, a pesar de que su densidad de tráfico no es demasiado elevada, de ahí que la DGT ponga en marcha campañas específicas dirigidas a concienciar a los conductores para reducir el riesgo.
Además, ha llamado a la prudencia de los conductores y a su implicación en el cumplimiento de los límites de velocidad y las normas de circulación, al tiempo que ha recordado que, al margen de esta campaña, la Dirección General de Tráfico está reforzando los controles en las carreteras convencionales tanto con radares estáticos como dinámicos.
También ha subrayado la necesidad de reforzar las políticas de prevención, coordinación y educación, junto al desarrollo de acciones correctoras, que poco a poco “están dando sus frutos”.
Campaña de 2017. Durante la campaña del pasado año sobre carreteras convencionales, desarrollada por la DGT entre el 23 y el 29 de octubre, los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil controlaron 15.467 vehículos y 832 conductores fueron sancionados, un 5,4%.
Un total de 421 conductores, casi la mitad de los sancionados (un 50,6%) fueron denunciados por circular a una velocidad superior a la permitida, lo que indica, según el subdelegado, que el cumplimiento de los límites de velocidad “sigue siendo una asignatura pendiente”.
La segunda infracción más habitual fue la del cinturón de seguridad: 64 personas fueron denunciadas por no usarlo y otras seis por no llevar a los menores con su correspondiente sistema de retención infantil.