SBN. La normalidad ha imperado en la salida procesional de este 15 de agosto de la Virgen de los Reyes por las calles aledañas a la catedral de Sevilla. La patrona de la capital hispalense y de su Archidiócesis, título que ostenta la imagen desde que en 1946 fuera así proclamada por el pontífice Pío XII, ha estado acompañada en todo momento por sus devotos fieles, que esperaban desde primera hora de la mañana agolpados tras las vallas de seguridad dispuestas por el dispositivo especial del Ayuntamiento capitalino.
Durante unas dos horas (se ha recogido en torno a las 9.50), la Virgen de los Reyes ha camino entre vítores, cantos y palmas por el entorno de su templo. A su salida, por la Puerta de los Palos, como manda la tradición, el fervor se hacía notar y la ansiada espera tocaba a su fin.
Momentos emotivos, como cada año, se han vivido en las calles del centro de Sevilla un 15 de agosto más. Por fortuna, el desarrollo de la procesión ha sido el esperado, sin contratiempos ni grandes incidentes, dejando un balance de 18 asistencias leves por parte del dispositivo sanitario compuesto por el Epes-061 y Protección Civil.
En este dispositivo especial, organizado por la Delegación de Gobernación y Fiestas Mayores, han participado los servicios de emergencias municipales, Policía Local, Bomberos y Protección Civil del Ayuntamiento de Sevilla, así como, de las Áreas de Movilidad y Fiestas Mayores y del CECOP. El operativo se ha desarrollado de manera coordinada con la Subdelegación del Gobierno en Sevilla, con el Cuerpo Nacional de Policía, Guardia Civil y Epes-061 y 112.