M.C. Contreras. El Ayuntamiento de Marchena lleva a cabo un proyecto para la recuperación de caminos rurales. El objetivo es arreglarlos para el disfrute de la población por lo que, a su vez, piden mantener su cuidado, que no sirvan de vertederos.
El proyecto consiste en arreglar los caminos, trazarlos, recuperar y señalar rutas de senderos rurales para el disfrute de caminantes y ciclistas. De esta manera se fomenta el deporte, el turismo rural, pero, sobre todo, la concienciación por cuidarlos y no verter residuos ni basuras.
Una ruta de 25 kilómetros. En materia de señalización de senderos, en el año 2012, El Taller Verde señalizó un tramo del Camino de Jarda (un trayecto de 11 km) con carteles para promocionar el acercamiento a este espacio natural de Marchena por caminos, atravesando el río Corbones y el arroyo del Salado.
Ahora, el Ayuntamiento ha continuado colocando más señales, en el inicio (junto a las pistas de atletismo), en el trayecto (Corbones y Salado), en el final (cordel de Jarda) y postes por el trazado para no perderse. Es la primera parte de un proyecto, que incluye la creación de un sendero circular de 25 kilómetros.
La alcaldesa, María del Mar Romero, insiste a la población en mantener limpios estos caminos. Hace unos días denunció en su propio perfil de redes, los vertidos de muebles y restos de obras encontrando en uno de los caminos rurales de Marchena, Camino de las Cuestas.
¿Qué son? Los caminos rurales unen las aldeas y las poblaciones más pequeñas de mercado regional, y son los caminos terciarios, secundarios y de penetración. Normalmente, no son pavimentados, o tienen una capa delgada de asfalto; son más angostas y las curvas son más cerradas y las cuestas más empinadas que las de las carreteras.
Pueden ser de toda estación o sólo temporales y, a menudo, tienen vados o transbordadores en vez de puentes. Las carreteras que cruzan las regiones rurales, sean pavimentadas o no, se tratan en el artículo carretera.