Redacción. El no descansar lo suficiente tiene consecuencias en el organismo, en el estado de humor, en el ánimo… No dormir bien afecta a la salud orgánica y mental del que la padece. Crear rutinas favorece la conciliación del sueño, al igual que llevar un estilo de vida saludable. El lema del Día Mundial del Sueño, ‘Sueño regular, Futuro saludable’ , que hoy celebra la Unidad del Sueño del Hospital Universitario Virgen Macarena, incide en esta buena práctica.
Rutinas e higiene del sueño
Establecer horarios concretos para dormir y despertarse son algunos hábitos que aportan calidad al sueño, y por lo tanto a la salud. Aunque es cierto que la cantidad de tiempo que cada cual necesita dormir varía en función del individuo, desde la Unidad del Sueño sí recomiendan establecer una buena higiene del sueño.
“La alteración de la calidad del sueño puede estar relacionada con el deterioro en la función motora y cognitiva”, aseveran desde esta unidad que pertenece al servicio de Neurofisiología.
Al margen de las tradicionales pruebas del sueño como polisomnogramas o test de latencias múltiples de sueño, la unidad ha incorporado la actigrafía. Esta técnica permite, mediante un sensor colocado en la muñeca del paciente, registrar los movimientos de la mano y detectar patrones neurofísicos a lo largo del sueño y la vigilia.
Líneas de actuación
Actualmente, la unidad valora una media anual de 1000 pacientes con trastornos del sueño y realiza unos 300 estudios al año para su diagnóstico y tratamiento.
Uno de los proyectos futuros de esta unidad es la implantación de un programa de terapia cognitivo-conductual, especialmente encaminado al tratamiento de los pacientes con insomnio. “Esta iniciativa, que ha demostrado ser eficaz en este tipo de pacientes, contribuirá a la educación del sueño en la población general”, explican las profesionales sanitarias de la citada unidad.
A día de hoy, la Unidad del Sueño del Hospital Universitario Virgen Macarena, tiene abierta una serie de líneas de investigación relacionadas con la hipersomnia central, con trastornos del sueño asociados a enfermedades neurodegenerativas o relativos a trastornos del neurodesarrollo en la edad infantil.