Redacción. Para el Día Mundial del Riñón, los especialistas del Hospital Macarena recuerdan que los datos actuales revelan un avance de la enfermedad renal crónica (ERC). El perfil de paciente: personas con más de 65 año con hipertensión, con diabetes y/o aquellas con obesidad.
El desconocimiento general en torno a esta enfermedad asintomática en su estadio inicial dificulta su detección y complican su contención. Desde el Servicio de Nefrología del Hospital Macarena se afanan así en revertir la tendencia a partir de la detección precoz, la multidisciplinariedad y la investigación.
El Hospital Universitario Virgen Macarena apuesta por la atención integral y desarrolla un abordaje multidisciplinar en el seno de su unidad cardiorenal, así como en las consultas de onconefrología, donde diferentes especialistas consensuan decisiones diagnósticas y terapéuticas que conciernen a pacientes con enfermedad renal. «Los resultados de estas consultas son enteramente satisfactorios para el paciente y obtienen mejores resultados globales en salud», afirma, la doctora Mercedes Salgueira, jefa del Servicio de Nefrología del Hospital Universitario Virgen Macarena.
Del lado de la investigación, el referido Servicio sanitario participa en este momento en más de 20 ensayos clínicos en el ámbito de glomerulopatías, nefritis en enfermedades sistémicas, enfermedad renal diabética, complicaciones de la enfermedad renal crónica y fracaso renal agudo, «cuyos resultados están siendo alentadores, abriéndose la posibilidad del uso de estos nuevos fármacos para el tratamiento de la enfermedad en un futuro no muy lejano», como describen los especialistas del centro hospitalario.
En relación a la detección precoz es muy importante la concienciación social y un abordaje multidisciplinar en estrecha colaboración con Asistencia Primaria. La ERC se caracteriza por ser progresiva y asintomática en estadios iniciales, lo que provoca que pase desapercibida en muchos casos y se trate de una enfermedad infradiagnósticada, «por lo que debe ser estudiada de manera dirigida en los grupos de riesgo de pacederla», arguye la facultativa.
En cualquier caso, esta detección temprana está permitiendo la instauración de los nuevos tratamientos disponibles actualmente, que han demostrado de forma robusta su potencial para retrasar la progresión de la enfermedad a estadios avanzados de enfermedad así como las complicaciones asociadas.
Para aquellos pacientes en situaciones patológicas más avanzadas el centro hospitalario dispone de la Unidad ERCA -Enfermedad Renal Crónica Avanzada- , certificada con la acreditación de Nivel Excelente por la Sociedad Española de Nefrología; contando además con consultas monográficas de enfermedades glomerulares, quísticas, enfermedad renal diabética, nefropatías intersticiales y trasplante renal.
Aunque una gran proporción de la ERC puede prevenirse mediante estilos de vida saludables, prevención y control de factores de riesgo, prevención de lesiones renales agudas, optimización de la salud materna e infantil y abordaje de determinantes sociales y estructurales de la salud; los resultados de estas intervenciones serán visibles a largo plazo.
Sin embargo, «las nuevas herramientas terapéuticas de que disponemos ahora, nos permiten hablar de tratamientos efectivos antes de llegar al tratamiento renal sustitutivo. Realizar un diagnóstico e instaurar estos tratamientos «a tiempo» es salvar vidas», asevera la doctora Mercedes Salgueira.